Exhortan a la ciudadanía a no nadar en el agua de los canales de riego debido al enorme riesgo que esto implica a su vida. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Ante la próxima apertura de las presas Lázaro Cárdenas y Francisco Zarco, y el consiguiente flujo de agua que correrá por los canales de riego de la mancha urbana, preparan operativos de vigilancia en las márgenes de la infraestructura, a fin de reducir al máximo el número de decesos por ingresar a nadar.
Vicente García Ramírez, director de Protección Civil en Lerdo, dijo que se montará un operativo para recorrer los canales dentro de la zona urbana y la periferia, para exhortar a las personas a que se salgan del canal, en caso de encontrar gente nadando o con intenciones de ello. La Dirección de Seguridad Pública apoya con el retiro de quienes se introduzcan a esta infraestructura.
Señaló que el tramo de mayor riesgo va de la represa de San Fernando hasta el kilómetro 7 de Tlahualilo, mientras que en el canal Sacramento, son 4.5 kilómetros que van junto a colonias de la periferia, como la Emiliano Zapata, César G. Meraz, Roberto Fierro, Lázaro Cárdenas, Armando del Castillo.
"Por el lado del canal Tlahualilo tenemos Las Brisas, Francisco Villa Norte y Sur, Luis Donaldo Colosio y sobre todo, en la parte ya norte, está la colonia San Juan, que también a los jóvenes les quedan a escasos 100 metros los canales de riego", indicó.
El funcionario explicó que se llevarán pláticas a las escuelas para crear conciencia entre jóvenes y niños sobre los riesgos de entrar a nadar a los canales de riego, así como el caminar cerca de las márgenes de los mismos, pues se puede presentar un accidente donde terminen cayendo al agua.
Refirió que el año pasado hubo tres personas que murieron ahogadas, lo que consideró una estadística baja, pues en años anteriores hubo hasta nueve decesos de gente que se introdujeron a las aguas, no solamente de los canales, sino incluso del río Nazas.
Señaló que hubo reportes incluso de vehículos que terminaron dentro de los canales, casos que se evidenciaron hasta que se vació el agua.
García Ramírez consideró que esta concientización sí ha servido porque han sido menos los niños que se observan en los canales.
