A Jennings, un afroamericano de 61 años, lo declararon muerto a las 18:33 hora local tras recibir una inyección letal en la prisión de Huntsville (cercana a Houston), notificó el Departamento de Justicia Criminal de Texas. (ARCHIVO)
El estado de Texas (EUA) ejecutó este miércoles a Robert Jennings por asesinar a un policía durante el robo de una librería erótica en Houston en 1988.
A Jennings, un afroamericano de 61 años, lo declararon muerto a las 18:33 hora local tras recibir una inyección letal en la prisión de Huntsville (cercana a Houston), notificó el Departamento de Justicia Criminal de Texas.
Sus últimas palabras fueron: "A mis amigos y a mi familia, este fue un bonito viaje. A la familia del policía, espero que esto (la ejecución) les de paz y espero que estén bien. Disfruten los momentos de la vida porque nunca los recuperamos".
Jennings fue condenado a muerte en 1989 por el asesinato el 19 de julio del año anterior del policía Elston Howard, que en ese entonces tenía 24 años.
De acuerdo a documentos judiciales, Jennings y su amigo David Lee Harvell salieron esa noche hacia un club de striptease, pero cuando no les dejaron entrar por no llevar documentación, optaron por robar una librería erótica.
Cuando Jennings entró al negocio revolver en mano, se encontró a Howard con el dependiente arrestado, que minutos antes había mostrado ilegalmente películas pornográficas a un agente encubierto.
El ejecutado mató al policía de cuatro disparos, y después robó al dependiente la recaudación.
Al regresar con Harvell y contarle lo sucedido, su cómplice y amigo le disparó en la mano y lo echó del vehículo.
A Jennings lo encontraron horas después en un hospital de Houston al que acudió para tratarse la herida de bala y confesó el asesinato del policía.
Por ese crimen, a Jennings, que en 1988 tenía 30 años y que había entrado y salido de prisión varias veces por diversos robos, fue condenado a muerte; mientras que Harvell recibió una pena de 55 años de cárcel.
Desde que el Tribunal Supremo restituyó la pena de muerte en 1976, en EUA han sido ejecutados 1,491 reos, 559 de ellos en Texas.
