Comercio. El IMEF estima que el nuevo tratado comercial será favorable para la economía mexicana. (ARCHIVO)
El IMEF Laguna ve positivo el nuevo Tratado de Libre Comercio de América del Norte, dado que pese a la cláusula en donde se prohíbe celebrar, entre las partes, un acuerdo comercial con países que representen una competencia comercial desleal, como es el caso de China, estiman posible incrementar el comercio con dicho país.
Carlos Thome, presidente de IMEF Laguna comentó que las actuales circunstancias del mercado chino, en donde hay una gran población, sino que tiene un alto poder de compra, coloca a México en una posición favorable para incrementar el comercio con China.
Aseguró que, inclusive, esto favorece de manera importante las exportaciones mexicanas, aún sin necesidad de firmar un tratado comercial con ellos.
Explicó que, para efectos de este nuevo Tratado de Libre Comercio de América del Norte, en donde EU logró colocar una cláusula que prohíbe celebrar tanto a Canadá, México y el propio EU, un acuerdo con países que representen una competencia comercial desleal, tal es el caso de China.
GRAN INTERCAMBIO
Mencionó Carlos Thome que México, a pesar de que no se tiene signado un convenio comercial, ha logrado intercambiar mercancías por un monto superior anual de 70 mil millones de dólares.
Dijo que China es el segundo mercado más importante para las importaciones de México, representando el 17 por ciento del total de las compras que realiza el país.
El monto que refiere es de 63.7 miles de millones de dólares.
Señaló que China es la tercera nación a quien México más exporta sus productos, operaciones que representan un monto por 7 mil millones de dólares anuales.
Precisó que la actual actividad comercial con China es regulada de acuerdo a las políticas internacionales (OMC).
Sin embargo, comentó que, a pesar de la condición estadounidense de no ejercer convenio alguno con este país, IMEF Laguna considera que las circunstancias globales como lo es la guerra comercial que se libra entre EU y China, en donde hasta el día de hoy supera los 238 mil millones de dólares en aranceles.
Lo que se destacó es que el creciente del mercado chino se convierte en la región con el mayor número de población millonaria, y de clase media en el planeta con cerca de 300 millones de habitantes, con poder adquisitivo para gastar.
Opinó que esto lo convierte en el país asiático con la más alta necesidad de consumo que se haya registrado en la historia.
El presidente de IMEF Laguna expresó que esto se demuestra con la necesidad del gobierno chino de crear la Feria Internacional China Imports, la cual se realizará en noviembre, en donde expondrán al mundo todos los productos que están demandando.
‘Hasta que se firme’
Jesús Seade Kuri, jefe negociador del Tratado de Libre Comercio, designado por el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, señaló que el nombre oficial del nuevo acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá, se determinará una vez que se firme dicho convenio.
“Tenemos que ser cuidadosos y no decir un nombre que no pueda copiarlo [...] tiene que ser un nombre pronunciable, sencillo”, subrayó.
Ello, luego de que la víspera López Obrador convocó a sus seguidores a participar en una encuesta sobre un eventual cambio de nombre al dicho acuerdo, en el que pide adoptar un nombre en español.
En entrevista con Despierta con Loret, Seade Kuri dijo que el acrónimo de USMCA que se maneja en los medios de comunicación para nombrar dicho acuerdo era impronunciable y además se lee en inglés.
Mencionó que el nombre de AMEC (T.ratado/M.éxico/E.stados unidos/C.anadá), sonaba bien, pero es acuerdo, el tratado anterior se llamaba TLCAN, con T de Tratado, correctamente, y NAFTA con A de acuerdo, por lo que el nombre del nuevo acuerdo comercial, dijo, debe tener una letra T, porque es un tratado comercial.
Señaló que a él, en lo particular, le gusta el nombre de TEUMECA (T.ratado/E stados U.nidos/ME xico/CA nadá), porque “es muy mexicano” y consideró que dejar el nombre de TLCAN como se llamaba, sería algo confuso porque rompería con el nombre que se le ha dado a la negociación en Estados Unidos.
En otro tema, detalló que cuando él intervino en las negociaciones del tratado comercial, el capítulo energético ya era un tema cerrado y acordado sobre ciertas bases.
Explicó que él hizo una presentación al presidente electo de los resultados que había en las principales áreas y le comentó que era muy necesario que se reconsiderara esto “porque debe quedar muy claro, muy firme, el pronunciamiento de la soberanía nacional y también porque debe ser políticamente sensible la forma en que tratemos esto”.
