Un pago de 400 millones de dólares a Irán hace siete meses estaba condicionado a que deje en libertad a un grupo de estadounidenses presos. (ARCHIVO)
El gobierno estadounidense se encuentra bajo una lluvia de críticas por parte de la oposición republicana, tras admitir que un pago de 400 millones de dólares a Irán hace siete meses estaba condicionado a que deje en libertad a un grupo de estadounidenses presos.
La explicación ofrecida el jueves fue la primera vez que Estados Unidos trazó un vínculo claro entre los dos sucesos. Según los críticos, la medida constituyó un pago de rescate.
El portavoz del Departamento de Estado John Kirby aseguró que las negociaciones, para devolverle a Irán el dinero incautado en una cuenta que databa de los años setenta para la compra de equipo bélico estadounidense, se realizaron separadamente de las realizadas para conseguir la libertad de cuatro ciudadanos estadounidenses detenidos en Irán. Sin embargo luego admitió que Estados Unidos retuvo el dinero hasta que Irán permitió la salida del país de los norteamericanos.
Kirby declaró el viernes en el programa "Morning Joe" de la MSNBC que Estados Unidos "no tiene nada de qué disculparse".
"Primero que nada, ese dinero era de Irán, ¿bien? Era un dinero que ellos iban a recibir de todas maneras", declaró.
Añadió: "Lo segundo es que había un equipo negociando para traer de vuelta a estos estadounidenses. Eso era un canal separado. Y sí es cierto que al concretarse el acuerdo nuclear, estos dos canales estaban uniéndose y nosotros aprovechamos esa circunstancia. No vamos a pedir disculpas por eso".
Kirby dijo que "no le tenemos mucha confianza a Irán, así que desde nuestro punto de vista, hubiera sido imprudente concretar el pago... sin tener de regreso a nuestros ciudadanos".
El intercambio del dinero por los prisioneros se realizó el 17 de enero, suscitando críticas de republicanos de que se trató de un pago de rescate a cambio de la libertad de rehenes, algo que Estados Unidos históricamente ha rechazado.
Varios legisladores republicanos, tras la admisión del gobierno realizada el jueves, inmediatamente fustigaron a las autoridades por el intercambio.
"Es algo que no cabe duda: si se realizó un pago que dependía de la libertad de rehenes, a eso se le llama rescate. La verdad tiene su valor, y el presidente le debe una explicación al pueblo estadounidense", declaró el senador republicano Ben Sasse.
Otro senador republicano, Richard Burr, líder de la Comisión de Inteligencia del Senado, denunció: "Decisiones como esta nos ponen en riesgo a nosotros y a nuestros aliados".
El candidato republicano Donald Trump acusó al presidente Barack Obama de mentir.
"Negó que era un pago por rehenes, pero lo era. Dijo que no iba a pagar un rescate, pero sí lo hizo. Mintió sobre los rehenes de manera descarada", exclamó Trump en un evento de campaña el jueves a la noche en Charlotte, Carolina del Norte.
