Exagerado. El guardaespaldas asegura que casi todo le molestaba al engreído rapero.
Kanye West puede tener una gran cantidad de seguidores y fanáticos que harían lo que fuera por él, al igual que una gran cantidad de detractores que no soportan el ego del rapero. Es por eso que este artículo quizás fomente más aún el odio al esposo de Kim Kardashian.
En una entrevista con The Sun, un exguardaespaldas de West dio a conocer cómo es trabajar para el rapero... y no es nada fácil.
Steve Stanulis, quien sólo estuvo dos semanas en el cargo antes de ser despedido por hablar con Kim Kardashian, describió cómo fueron los pocos días que estuvo con West. "Una vez me tocó ver a su hija y fue mucho más fácil que cuidar al padre", aseguró el guardaespaldas, quien también trabajó para Leonardo DiCaprio y Tobey Maguire, entre otros.
"He trabajado para grandes celebridades, pero nunca había trabajado para alguien como él. Es diez veces peor de lo que creen", dijo.
Según contó, antes de comenzar su trabajo, le habían advertido que su misión no era nada fácil, ya que varias personas habían pasado por el puesto y que incluso una no duró más de una hora; pero jamás pensó que fuera para tanto.
Por otra parte, el rapero le dio la orden a Stanulis de nunca hablar ni dirigirse a Kardashian, luego de que éste se presentara a la celebridad de televisión. Es por eso que la noche de la Gala Met, que se realizó a principios de mayo, fue despedido, ya que fue visto por West hablando con su esposa en un pasillo.
