Más violencia. Los muchachos respondieron con violencia ante la represión de la policía en Chile.
Estudiantes universitarios de Chile exigieron el jueves educación gratuita en todos los niveles, entre otras demandas, durante una jornada sellada con "hechos de gravedad" como saqueos, quema de locales comerciales e incidentes de violencia.
En Santiago, la mayoría de los destrozos tuvo lugar en la Alameda del Libertador Bernardo O'Higgins, la principal arteria de la capital chilena.
En una importante extensión de la Alameda se encendieron fogatas y se arrancaron los semáforos, señales de tránsito y mobiliario urbano para usarlos de barricadas.
Una decena de locales comerciales, entre ellos una ferretería y una farmacia, fueron destruidos y encapuchados ingresaron al interior para consumar el robo de diversos productos.
Una sucursal del Banco de Chile también fue blanco de bombas incendiarias que dejaron severos daños, lo mismo que la Iglesia de la Gratitud Nacional, atacada con bombas molotov.
Poco antes de la jornada, varias empresas decidieron acortar los horarios laborales y el comercio en el centro de Santiago también cerró sus puertas para evitar destrozos. La militarizada policía de Carabineros activó sus carros lanza-agua y lanza-gases para dispersar a los pequeños grupos de encapuchados que protagonizaron los incidentes en el centro de la capital. Los encapuchados lanzaron piedras y bombas incendiarias.
En algunas zonas periféricas de Santiago, algunas personas levantaron anoche barricadas para interrumpir el tránsito, mientras que en otros lugares se reportaron cortes de energía eléctrica.
En regiones, como Valparaíso, distante 120 kilómetros al noroeste de Santiago, también hubo incidentes, saqueos e incendios al término de la marcha estudiantil, que también encontró eco en otras ciudades del país.
Ayer se realizaron tres marchas en Santiago, entre ellas la convocada por la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES), tras la cual se realizó una de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones).
Por la noche fue el turno de la universitaria Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), donde sobrevinieron los incidentes más graves de la jornada.
Primer paso de Bachelet
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, promulgó ayer la Ley de Inclusión Escolar, que termina con el lucro, la selección y el co-pago en los colegios que reciben financiación pública, el primer proyecto de la profunda reforma educativa que impulsa el Gobierno.
La nueva normativa entrará en vigencia el 1 de enero de 2016 y afectará a los centros de educación básica y secundaria públicos y a los privados que reciben financiación estatal.
“Podemos decir con orgullo que tendremos una educación sin lucro, donde se terminarán las discriminaciones a los niños y el co-pago dejará de ser una carga para las familias”, dijo Bachelet durante la ceremonia de promulgación de la ley.
