La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) demandó al gobierno del presidente Enrique Peña Nieto el reconocimiento a las plazas que se pagan con los recursos estatales y no tienen reconocimiento a nivel federal.
Luego de calificar como "una burla" el incremento del 3.5% directo al salario que negoció el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), porque representa sólo la posibilidad de comprar seis tortillas más al día o un boleto y medio del Metro, los dirigentes de la CNTE anunciaron que de no cumplirse sus demandas en el mes de mayo, las movilizaciones se incrementarán en todo el país.
En conferencia de prensa, los dirigentes del magisterio de los estados de Oaxaca, Guerrero, el Distrito Federal y Michoacán pidieron que con base en la reforma educativa y la creación de la nómina única magisterial ningún maestro sea removido.
Juan José Ortega Madrigal, secretario general de la sección 18 de Michoacán, también incluyó en las demandas el reconocimiento a los trabajadores comisionados, al señalar que la ley de coordinación fiscal afecta los derechos de los trabajadores. Se trata de personas que tienen nombramiento como docentes y luego fueron a tareas administrativas que hoy piden ser relevados.
Afirmó que la CNTE tiene condiciones de organización y "esperamos que en un plazo que no vaya más allá de mayo se atiendan (las demandas) de lo contrario nos reservamos el derecho a actuar" estableció como ultimátum.
Dijo que de no atenderse el pliego de demandas existe la posibilidad de "una insurgencia magisterial en contra de las leyes que atentan contra los trabajadores".
Rubén Núñez, secretario general de la sección 22 de Oaxaca aseguró que el pliego de demandas incluye las peticiones y necesidades de cada una de las secciones y que el diálogo que se ha abierto en la secretaria de Gobernación busca que por la vía del diálogo sean atendidas.
La CNTE dijo iniciar con esta marcha 25 años de lucha permanente, en recuerdo de que en 1989 también exigieron un incrementos salarial.
Enrique Enriques, secretario general de la sección 9 en el Distrito Federal, señaló que en ningún momento el jefe de gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, ni el secretario de Gobierno, han sostenido ninguna comunicación con la CNTE.
En tanto que los dirigentes coincidieron en descalificar el incremento salarial negociado por la dirigencia del SNTE, encabezada por Juan Díaz de la Torre.
Al considerar que es insuficiente el 3.5% anunciaron que insistirán en la Secretaría de Gobernación y ante los representantes de la Secretaria de Hacienda en un incremento mayor.
En tanto que del bono de dos mil pesos que fue autorizado para los maestros y los mil 700 pesos para los trabajadores de apoyo, el michoacano Juan José Ortega Madrigal consideró que se requiere aún fortalecer los ingresos de los trabajadores y que aún existe mucho camino por andar.
