El ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Juan Silva Meza, garantizó que el Poder Judicial de la Federación cuenta con las normas y mecanismos para las conductas de aquellos elementos que no se conducen con estricta honorabilidad.
"En el Poder Judicial de la Federación queremos que la sociedad cuente con impartidores de justicia intachables", dijo al pronunciarse por primera vez y públicamente sobre la presunta red de tráfico de influencias de magistrados y jueces para beneficiar al zar de los casinos, Rojas Cardona.
Ante funcionarios de la Secretaría de Gobernación (Segob) y representantes de organismos multilaterales, Silva Meza demandó a los juzgadores respetar la propia autonomía e independencia con la que cuentan a través de la honorabilidad de sus decisiones.
"En el Poder Judicial de la Federación queremos que la sociedad cuente con funcionarios del Estado, que no comprometan su criterio, o que desahoguen los juicios en cauces ajenos, a lo legalmente establecido", expresó durante la presentación en México del informe "Garantías para la independencia de las y los operadores de justicia.
Hacia el fortalecimiento del acceso a la Justicia y Estado de derecho en las Américas". Silva Meza dijo que la autonomía y la independencia de los operadores de justicia es un binomio que constituye una "piedra angular" del sistema democrático de México.
"Los juzgadores federales tenemos la convicción de que, al actuar con rectitud, con honorabilidad, con imparcialidad y transparencia, abonamos a la confianza social y, con ello, justificamos nuestra exigencia de respecto a la independencia judicial", expresó durante su discurso.
Y agregó: "si las y los juzgadores queremos independencia y autonomía, nunca debemos regatear el derecho de la sociedad a exigir de nosotros, una absoluta rendición de cuentas y un desempeño invariablemente profesional, honesto, transparente, excelente, oportuno y eficaz".
Al término del evento, el ministro Silva rechazó fijar una posición más contundente respecto a las irregularidades en el comportamiento de los juzgadores, a pesar de que él preside el Consejo de la Judicatura Federal, órgano que por lo pronto determinó suspender a los funcionarios judiciales involucrados en esta red de tráfico de influencias.
Justificó esta decisión con el argumento de que con las decisiones del CJF de suspender a los funcionarios judiciales se había fijado una postura y que no podía agregar comentarios porque las investigaciones están en curso.
