La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) captó y destruyó más de 300 armas largas y cortas en una semana, en los municipios más peligrosos del Estado de México, informó Noé de Jesús Vázquez Pérez, director de vinculación de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
"No es una pistola pero espanta", afirmó Teresa, habitante de Tlalnepantla que entregó en la explanada municipal, un revólver de balines por el que recibió 150 pesos.
Por una Carabina 30-30, un ciudadano recibió 4 mil pesos y Carlos decidió entregar más de 2 mil cartuchos calibres 38 especial y 9 milímetros, que su familia mantuvo ocultos por casi 20 años, luego de la muerte de su padre que era instructor de tiro.
"No me gusta tener armas en casa, porque aunque estén guardadas y ocultas, llaman la atención y curiosidad de los niños", señaló Teresa, quien evalúa llevar un rifle a este módulo de captación y destrucción de armas.
El programa de desarme voluntario se lleva a cabo en 36 municipios mexiquenses con mayor incidencia delictiva, donde hay un presupuesto de 26 millones de pesos para el pago a quien entregue armas inservibles, descompuestas y en buen estado, indicó el director de vinculación de la SSC.
Esta semana los módulos de captación de armas estarán en Naucalpan, Tlalnepantla, Cuautitlán y Cuautitlán Izcalli, indicó el funcionario estatal.
En Coacalco, Tecámac, Zumpango, Chicoloapan y Atizapán, captaron en una semana 300 armas cortas y 100 largas, indicó Vázquez Pérez.
