Con la exactitud de un apotegma algebraico Lao Tsé afirmó: "Quien se alza de puntillas no se yergue firmemente. Quien se apresura no llega lejos. Quien intenta brillar, vela su propia luz. Quien se define a sí mismo, no puede saber quién es. Quien ejerce poder sobre otros, no tiene poder sobre sí. Quien se aferra a su trabajo, no creará nada duradero. Si quieres armonizar con Dios, haz tu tarea y luego suéltala."
Soltar es auténticamente mágico, es ejercer el desapego, es atacar el miedo. Hoy suelta los problemas, el dolor, la adversidad, que debes recordar que no son tuyos, son de la vida. Soltar te lleva a estar abierto al cambio para tener tu alma dispuesta a recibir los dones y bienes que el universo tiene para ti.
Si eres terco "como una mula" y no entiendes el poder de soltar el ayer, para seguir adelante en tu tarea de aprender; tu carga emocional será tan pesada que te impedirá levantar vuelo, para aprender a disfrutar el pedazo de cielo que tienes en esta vida.
Soltar amarras al duelo, es dejar de poner peros a tu vida, de concentrar tu fuerza en el exterior y colocarla en tu centro, es mudar de aires, "hacer limpieza al armario" y mudanza en la casa de tu alma, para dejarte sorprender por el ramillete de los "pequeños" milagros que siempre Dios tiene para ti.
Cuando acudes a tu maestro interior, aprendes la innata sabiduría de dejar de aferrarte a cosas o personas y soltarlos, alineas alma, mente y corazón, entonces tus acciones sólo traen felicidad y abundancia, paz y armonía; así estarás conectado con tu Divinidad; sólo inspiración, éxito, realizaciones y plenitud llegan a tu vida, porque transformas la ira y el miedo en un inacabable proyecto de amor.
Entonces sin saber ¿por qué?, das lo mejor de ti y como por arte de magia te llegan sólo cosas espectaculares. No en balde la sabiduría popular dice: "Si una persona se aferra a su pasado, muere cada día un poco"1
Nuestra existencia es un permanente ejercicio de acierto-error, el grave problema es que olvidamos los éxitos y nos enganchamos a los tropiezos, a las situaciones negativas, omitiendo cuando perdemos, ganar la experiencia y sacar la ganancia.
Generalmente los problemas llegan cuando queremos controlar a la gente y a la vida, que las cosas o personas sean como nuestros arquetipos dictan.
Soltar es entender que hay cosas y personas que salen de nuestro control, lo importante es que controlemos nuestras emociones, así no estiraremos la liga del estrés y viviremos con una reconfortante paz interior.
El aforismo dicta: "Una cosa lleva a la otra", querer controlar, es no soltar, eso te genera estrés, éste trae a tu organismo químicos como el cortisol, entonces llegan los triglicéridos y colesterol, que en conjunto, disminuyen tu sistema inmunológico e inevitablemente llega la desarmonía a tu cuerpo, y con ella la enfermedad.
El secreto es muy simple, aprende a vivir en el aquí y el ahora, entiende que nada es para siempre, -ni lo bueno, ni lo malo- y si el principio básico de la vida es el cambio, disponte a dejar partir la autocrítica, la culpa, para que tu alma esté abierta a que goces el amor que te conduce al despertar espiritual que transforma, que trae sanidad, que libera y al honrar tu vida, te encuentra con tu yo Divino.
Mi tarea cada día es construir el universo imaginario del viejo Filósofo, -que en el fondo es el tuyo y el mío- mi deseo es que el humor y el amor se conviertan en parte de tu vida, que alineemos nuestra energía dándonos cuenta que al final de la jornada "Somos Uno".
Hermafrodito llega a la funeraria, el encargado le dice:
-¿Qué quiere que le hagamos a su suegra: la incineramos o la sepultamos?
-Las dos cosas… ¡Pa' no correr ningún riesgo!
1http://www.crecimiento-y-bienestar-emocional.com/soltar.html
www.filosofoguemez.mx
