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¿Que los ricos producen riqueza? Sí, cómo no.

Satiricosas

MANÚ DORNBIERER

"Desde paraísos fiscales hasta débiles leyes de empleo, los más ricos se benefician de un sistema económico global que está amañado a su favor. Es hora de que nuestros líderes cambien el sistema para que funcione en el interés de toda la humanidad en lugar de hacerlo para una élite mundial".

Si a estas alturas del partido hay aún algún despistado que cree que esto es una mentira de la izquierda mundial, es hora de que se entere de las cifras duras, las únicas que entienden los "despistados" admiradores y lambiscones de los megarricos.

Se publican las dichas cifras en el informe "The cost of inequality: how wealth and income extremes hurt us all, es decir: El costo de la inequidad: Cómo la riqueza y los ingresos extremos nos dañan a todos, realizado por la ONG Intermón Oxfan.

1.- En el año 2012 los 100 más ricos del planeta obtuvieron ingresos netos por 240 mil millones de dólares. Según especialistas ganaron 4 veces lo que se necesitaría para solucionar la pobreza extrema mundial.

2.- El 1% de "los más pudientes" han incrementado sus ganancias 60% en los últimos 20 años de indecente neoliberalismo (los epítetos son míos).

3:- La crisis financiera mundial no se detiene y no hace más que acelerar la tendencia.

El estudio advierte que "la riqueza y los ingresos extremos no sólo no son éticos, sino que además son económicamente ineficientes, políticamente corrosivos, dividen a la sociedad y son destructivos del medio ambiente".

José María Vera, director general de Intermón Oxfam, dice que "no podemos seguir fingiendo que la generación de riqueza por unos pocos beneficiará al resto:

"La concentración de recursos en las manos del 1% más rico debilita la actividad económica y hace la vida más difícil para el resto, particularmente para los más vulnerables y los más pobres. En un mundo en el que incluso los recursos más básicos, como la tierra y el agua son cada día más escasos, no podemos permitirnos concentrar activos en las manos de unos pocos y dejar a la mayoría pelear por lo que queda."

Y es que se estima que cada una de las personas que integran el selecto grupo del 1% más rico del planeta utiliza unas 10 mil veces más carbono que un ciudadano estadunidense medio.

Lo antes descrito es un mal del momento histórico que vivimos (y de otros en el pasado), un resultado de esos últimos 20 años de neoliberalismo impuesto a los países con su cauda de empobrecimiento general. Sin embargo, no se dio así el neoliberalismo en Brasil, que creció rápidamente al tiempo que reducía la desigualdad. El redactor compara esta etapa brasileña al éxito histórico de Estados Unidos en los años 30 (del siglo pasado) cuando se implantó el New Deal de Roosevelt que ayudó a reducir la desigualdad y a atajar los intereses espurios. En esta misma línea se manifiesta Vera y asegura que:

"Necesitamos un New Deal global para revertir décadas de incremento de la desigualdad. Como primer paso, los líderes mundiales deberían comprometerse formalmente a reducir la desigualdad a los niveles existentes en 1990".

¿Y quiénes son esos ricos?.- La población mundial ha pasado de los casi 1000 millones en el año 1,800 a más de 6,000 millones en el año 2000, y el 30 de octubre de 2011 se alcanzaron los 7,000 millones. Constantemente se mueven como es lógico los "contadores" (ver en Internet un sitio llamado worldometers).

Y sólo son 1426 las personas riquísimas que dominan este año de 2013 la economía mundial, según la revista Forbes especializada en la mega riqueza. Antes publicaba su lista anual de "millonarios", pero hoy es de "Billonarios". Stop.

Un paréntesis cultural indispensable (para memorizar o recortar).

De una vez por todas aclaremos con la adorada Wikipedia: "En la escala numérica larga utilizada tradicionalmente en español, y en la mayoría de los países de Europa Continental, un billón equivale a 1012, esto es, un millón de millones". Pero Forbes obviamente utiliza "El Billón Anglosajón": "En el siglo XVII una corriente de matemáticos minoritaria inglesa adoptó la denominación de billion para mil millones (109, un uno con nueve ceros, número que el resto llamaba millardo (milliard). Este significado es el que se ha mantenido en el inglés estadounidense, el portugués brasileño, el griego y el turco; en inglés británico el término billion mantuvo su denominación tradicional de 1012 hasta 1974, año a partir del cual comenzó a equivaler oficialmente al número 109, pasando por lo tanto a coincidir con la histórica acepción norteamericana de esa palabra. Vale aclarar, entonces, que el número billón (en castellano), al que se hace referencia en la entrada original, equivale, en el léxico anglosajón, a la cifra denominada como trillion (en inglés). Billón (1012) es igual a trillion (1012). O bien, billón equivale en números a un uno y doce ceros: (Hay que destacar que en Reino Unido en la enseñanza se sigue denominando "billion" a un millón de millones, pero debido a la influencia norteamericana poca gente se da cuenta de la diferencia con su uso en Estados Unidos). Enterados, lectores, volvamos a los riquísimos:

El número 1 es de México, Carlos Slim, (Telcom) al cual muchos siguen apodando "Carlos & Charlie". Lo conozco de tiempo atrás y alguna vez me cayó muy mal por su poco gusto por la pintura moderna. Actualmente me cae bien, no por su apodo por supuesto, sino por la obra magna que es la reconstrucción de la infraestructura de Acapulco, así la haga, como se dice, con sus compañías. Es raro encontrar a alguien en estos días en que vivimos en "El País de Otros", que sea como sea haga algo en México y para los mexicanos. Por otra parte, Telmex da bastante mal servicio con uno de sus parientes más ineficaces al mando. El 2º billionaire es Bill Gates, USA, Microsoft. Pero el 3º, que subió este año, es un español llamado Amancio Ortega, dueño de las tiendas Zara, en las que no volveré a comprar, porque este tío ha erigido su fortuna sobre el trabajo de niños menores de 15 años de Bangladesh y en lugar de pagarles decentemente y de levantar su nivel de vida y de salud, sólo explota su miseria.

 EL RESTO DE LOS RIQUÍSIMOS MEXICANOS Allá por el aciago año de 2011, hubo unas delicias de filtraciones, Wikileaks de México, publicados en La Jornada. Entre ellas un documento de la embajada gringa que decía: Varias dinastías de empresarios mexicanos que cada año figuran en la lista de multimillonarios de la revista Forbes deben sus fortunas a la privatización de empresas públicas emprendida por el expresidente Carlos Salinas de Gortari. Dinastías empresariales surgieron en los años de 1990, cuando el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari, del Partido Revolucionario Institucional, empezó a desmontar la centralizada economía mexicana. Salinas vendió más de mil empresas estatales, que iban de fundidoras a ferrocarriles. "Desafortunadamente, en algunos casos, esas privatizaciones llevaron a la creación de monopolios privados, que beneficiaron a algunos empresarios y políticos, mientras dejaban al mexicano promedio. "Un ejemplo clásico es la privatización de Telmex. Cuando Slim y sus socios adquirieron Telmex, en 1990, el gobierno les dio condiciones extremadamente favorables. No sólo el gobierno de México vendió el monopolio de TelMex intacto, sino estableció barreras a la competencia durante los seis años posteriores a la privatización. De manera similar, Ricardo Salinas Pliego adquirió la empresa estatal Imevisión mediante una subasta en 1993, convirtiéndola después en Tv Azteca".

El número 32, 2º billonario en México de la lista de Forbes Cabeza del exitoso Grupo Bal, conformado por la empresa de explotación de minas de plata Peñoles, de la compañía de seguros GNP, de las famosas tiendas El Palacio de Hierro y de la distribuidora de gaseosas y cervezas FEMSA, Alberto Balleres, (minas, hace poco vendió como accionista la Cervecería Cuauhtémoc-Moctezuma a la trasnacional Heineken por 7 mil millones de dólares, dejando de pagar 1,200 millones de dólares en impuestos (igual que la Aramburuzabala vendió La Corona de México, por cierto ojo, señora, con el Saca-Lana que hoy la acompaña). Y el número 40, el detestado Germán Larrea Mota Velasco & Familia (minas, entre ellas Pasta de Conchos), tiene muchas propiedades más. Como es obvio, en los tres casos de estos billionaires mexicanos la presencia de Carlos Salinas es conocida por propios y extraños. (Seguramente también está con otros). 11 billonarios mexicanos poseen el 10 por ciento del PIB y los 52 millones de pobres ¿QUÉ? ¿Hacemos algo, compatriotas o seguimos de borregos?

PD. Mi libro M:A.Acosta Chaparro, Verdugo de Acapulco, ya está en Amazon.

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