Durango

Delincuencia común: homicidios, lesiones, robos y drogas

La delincuencia común daña a más gente que la delincuencia organizada.

La delincuencia común daña a más gente que la delincuencia organizada.

Todos los días los llamados cholos o pandilleros se hacen presentes en distinto puntos de la ciudad; al igual que el crimen organizado hacen daño, pero éstos a más personas y a los sectores más sensibles.

Durango. Homicidios, agresiones contra policías, robos, drogas, asaltos y lesiones, son algunos de los delitos que comete la delincuencia común, aquella que no cuenta con las mismas capacidades de la delincuencia organizada pero que también hace daño y a más gente en esta entidad duranguense, aquella que no respeta a ningún sector de la sociedad y que si bien es cierto se hace lo posible para combatirla no ha sido suficiente para erradicarla; la semana inició con diferente hechos vandálicos como lo fue en el Barrio de Cantarranas, donde decenas de vecinos se enfrentaron contra los policías, quienes pretendían detener a unos sujetos que robaron y golpearon a un menor.

Las drogas, unas de las causas. Los últimos días, además de los constantes hechos violentos perpetrados por el crimen organizado, se ha registrado infinidad de sucesos delictivos cometidos por la delincuencia común.

Apenas la semana pasada El Siglo de Durango le informaba sobre los asesinatos de las colonias Mayagoitia y Juan Lira, el primero con arma de fuego y el segundo con arma blanca, producto de integrantes de diferentes grupos de cholos.

Todos los días en la Dirección de Averiguaciones Previas (DAP) acuden por lo regular señoras a presentar denuncias por robo a casa-habitación o en interior de vehículos, y es que uno de los factores que mueve a esta delincuencia común es la drogadicción, la mayoría de los detenidos en flagrancia de robo se encuentran bajo los efectos de algún enervante y cometen el delito para comprar más estupefacientes.

Todos los días hay agresiones. Asimismo, los señalamientos por parte de la ciudadanía se incrementan en torno a los asaltos y lesiones que cometen los cholos en contra de menores de edad, algunos integrantes de otras bandas de pandilleros y otros, inocentes, jóvenes que caminaban por territorio ajeno después de visitar a su novia o tras haber salido de la escuela o del trabajo.

También los mismos reportes policiacos señalan las constantes agresiones que reciben los agentes, pues la lucha contra la delincuencia común no es fácil, al momento de detener a un drogadicto, a un ladrón o a un cholo por alterar el orden público o ingerir bebidas embriagantes se oponen al arresto y arremeten contra la autoridad ya sea a golpes, con palos o piedras.

Se armó la “bronca” en Cantarranas. El caso más reciente fue el zafarrancho que se suscitó en el sector conocido como Cantarranas, al noreste del barrio de Tierra Blanca, donde varios sujetos, entre ellos Daniel Romero, vecino de la calle Segunda de Ruiz, le pusieron una corretiza al menor Alberto Villaseñor por todo el parquecito ubicado en Dolores del Río y Domingo Arrieta y tras alcanzarlo arremetieron en su contra y lo despojaron de su teléfono celular.

Una parte de los vecinos del lugar de inmediato llamó a la Policía al ver la agresión y el despojo, querían meterse a defenderlo pero a la vez tenían miedo de ser también agredidos. Cuando llegó la unidad procedieron a detener a Daniel Romero, quien había sido señalado por los testigos de la agresión, sin embargo, como se resistía al arresto y al usar la fuerza los policías la otra parte de los vecinos salió a golpear a los agentes.

A palazos traían a un comandante. Señoras y jóvenes con apariencia de cholos se le pusieron al tú por tú a los policías, inclusive el comandante Enrique Duarte recibió unos palazos en la espalda y en las manos, por lo que rápidamente pidieron refuerzos y al lugar arribaron por lo menos siete patrullas más, quienes salieron al quite de sus compañeros.

Finalmente, los vecinos del lugar le comentaron al reportero de este medio de comunicación que los robos y asaltos en este sector de la ciudad son constantes y que la gente no denuncia por que tiene miedo de represalias por lo que pidieron especial atención por parte de la Policía Municipal en esta zona de Cantarranas.

Daños.

Asesinato. Hace unos días en los terrenos de la colonia Mayagoitia fue asesinado Raymundo Guzmán Ávila con una escopeta y armas blancas.

Homicidio. Con dos cuchilladas en el pecho dejó de existir Alejandro Rojas Martínez en una de las calles de la colonia Juan Lira.

Latrocinios. Arturo Rodríguez Floriano fue detenido por la autoridad pero hasta después de robarse por lo menos 20 carros de la Zona Centro.

Navajazo. Juan Medrano Carrasco recibió un navajazo en el pecho y golpes diversos al ser interceptado por cholos en Jardines de Cancún.

Ataque. Diego Hernández, Israel Duarte y Manuel Hernández arremetieron contra los policías en la colonia González Avelar.

Intervención. Cuando Saúl Villalobos Muro vio que golpeaban a se hermano intervino y salió con una herida cortante, en la José Revueltas.

Narcomenudeo. Detuvieron a Leobardo Hernández, vecino de Jardines de Cancún, quien vendía droga, pero al parecer ya quedó libre.

Marihuana. En la colonia José Ángel Leal detuvieron a Víctor Manuel Astorga con diez bolsas de marihuana listas para su venta.

Ladrones por todos lados

Durango. La Policía Municipal informó ayer sobre la detención de David Soto Hernández, de 25 años, vecino de la colonia López Mateos, ya que de manera sospechosa trasladaba por la calle un tanque de gas y otros objetos, de los que no supo dar una explicación convincente sobre la procedencia de los objetos por lo que fue enviado a la Dirección de Averiguaciones Previas (DAP) por lo que le resulte.

Decididos a combatir la delincuencia juvenil

Durango. Con relación a los constantes hechos delictivos suscitados en la capital del estado, donde la mayoría de los autores son cholos y pandilleros juveniles, Mario Zaldívar Mijares, director de Seguridad Pública Municipal, informó que ya se implementó un nuevo grupo de combate a la delincuencia juvenil que opera especialmente en las inmediaciones de las instituciones educativas.

Este grupo a la par combate los señalamientos de venta, consumo y posesión de droga, por eso en ocasiones no visten el uniforme de la Policía Municipal, pues es una estrategia que les permite pasar inadvertidos ante los delincuentes.

Agregó que con estas nuevas acciones esperan disminuir los ilícitos cometidos por la delincuencia juvenil como lo es venta de droga, riñas, lesiones, robos y asaltos.

El funcionario municipal proporcionó a El Siglo de Durango las estadísticas de las acciones que en un año ha logrado esta dependencia.

El documento señala que en dicho periodo se logró la detención de diez mil 150 personas que alteraban el orden bajo los efectos del alcohol, mil 162 por posesión, consumo o venta de droga, 528 por robo, mil 120 por participar en riñas colectivas y 572 por graffiti.

Lesiones, riñas, robos y narcomenudeo son de los ilícitos más cometidos por la delincuencia juvenil.
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La Policía Municipal ha implementado más acciones para frenar los actos vandálicos en la ciudad.
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