De cara a su próxima muestra taurina en la Casa del Cerro, el escultor y pintor lagunero Álvaro Castaño trabaja en la Casa del Artista, donde da forma a su arte. (Fotografía de Jesús Galindo)
TORREÓN, COAH.- El pintor y escultor lagunero Álvaro Castaño Orozco, quien dentro de las bellas artes se ha especializado en el tema taurino, inició en el taller de la Casa del Artista su producción para la muestra que presentará a principios de 2008 en la Casa del Cerro.
El añejo complejo del sector Alianza, hoy convertido en museo, será el escenario donde el artista lagunero exponga el producto de su trabajo inspirado en la fiesta brava.
En su muestra, el público lagunero y sector crítico del arte, podrá admirar a figuras como Carlos Arruza, Lorenzo Garza y Valente Arellano, además de otras esculturas con el sello de la casa, donde se refleja el mundo del toro y sus bondades para la fiesta brava, además de los caballos, elemento fundamental en el ruedo.
“Espero la presencia del público integrado por aficionados, así como críticos de arte, a fin de que ellos mismos se den cuenta si hay avances en mi trabajo. En total serán 15 esculturas y diez pinturas, todas con temas taurinos, las que además estarán a la venta”.
Deja la ingeniería por las bellas artes
Ingeniero de profesión, a sus 42 años, Álvaro Castaño es hoy en día un artista en pleno ascenso dentro del arte, actividad a la que ha elegido para entregarse en cuerpo y alma desde hace años.
Este elemento sintió el llamado del arte hace 15 años, al ver trabajar a su tío Raymundo Cobo, un artista de altos vuelos, de quien aprendió técnicas de pintura. “Me maravillaron las cosas que hace y eso me llevó a descubrir mi verdadera vocación”.
Hace diez años se adentró en la escultura y ahí encontró una satisfacción aun mayor que la experimentada en la pintura, y a partir de ese momento su atención se centró más en esta actividad, donde ha logrado importantes obras.
A pesar de que los toros son su pasión, realiza otro tipo de obras, donde las satisfacciones son importantes, y una muestra es la escultura de Juan Pablo I que realizó y que luce en una importante vialidad del oriente de Torreón.
Aunque guarda profundo respeto, admiración y agradecimiento hacia su tío Raymundo Cobo y el maestro Ramón Reveles, quienes le han enseñado mucho de lo que hoy conoce sobre las técnicas de pintura, se dijo fiel admirador de la obra del maestro Pancho Flores (qepd).
“Lo admiro, es un genio de la pintura taurina, él tiene en su obra una media verónica de Lorenzo Garza con rodilla en tierra. Me gusta mucho y posiblemente la haría en escultura, creo que sería muy importante, aunque también tengo en mente hacer lo propio con algunas obras del maestro Reveles.
Quiere escultura en Coliseo del Centenario
Uno de sus sueños es lograr que una de sus obras sea parte del Coliseo del Centenario de Torreón, complejo que hoy se encuentra en proceso de edificación en esta ciudad.
“Me gustaría hacer una escultura para esa plaza, de preferencia un toro, o un toro con un torero en plena interacción. Sería muy bonito que fuera un matador de la región, representativo de lo nuestro, con una figura como Ricardo Castro, Valente Arellano o Arturo Gilio”.
Afirmó el artista que una de las figuras a las que le gustaría inmortalizar en bronce, es el rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza, sin duda uno de los grandes exponentes de la fiesta brava, aunque quizá para ello aún falta tiempo.
