Canacintra Durango reconoce que la 'nueva normalidad' complica al sector empresarial.
Debido a su tamaño habrá empresas sin fondos para establecer las medidas que marca el plan de regreso a la "nueva normalidad".
Magdalena Gaucín, Presidenta en Durango de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) señaló que si bien la prioridad de las empresas es la salud de colaboradores y clientes debe valorarse la capacidad económica de los negocios una vez que se decrete que las actividades pueden reanudarse.
"Tenemos que valorar qué empresas pueden pagar todo eso y qué empresas no, porque las pequeñas y medianas tendrían que invertir, incluso para tener personal adecuado que esté revisando, que esté cerciorándose (de que se cumplan las disposiciones)".
La adquisición de herramientas y equipo de oficina es otro de los planteamientos que deberá hacerse en las empresas puesto que se recomienda no compartir objetos a fin de disminuir la posibilidad de contagios.
Será dijo, un esfuerzo conjunto en el que los empleadores deberán invertir para mejorar las condiciones de sanidad en el centro de trabajo, pero los empleados deberán cumplir con las medidas establecidas.
La "nueva normalidad" dijo, tendrá que establecerse de manera paulatina para que pase del papel a la realidad de las empresas a nivel local.
Hace unos días, el Gobierno Federal anunció que el pasado 18 de mayo iniciarían actividades no esenciales los municipios en los que no se tenía registro de contagios.
Además, del 18 a 31 de mayo las empresas de la construcción, mineras y automotrices alistarían el regreso a sus operaciones a fin de reactivar actividades el 1 de junio.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a través de un comunicado anunció que son 78 los puntos que integran el Protocolo Activo de Seguridad Sanitaria (PASS) que deben cumplir las unidades económicas para reanudar actividades. Se incluyen disposiciones para la promoción de la salud, capacitación y gestión, entre otras.
El uso de equipo de seguridad, que incluye cubreboca y mascarilla, estornudo de etiqueta, horarios escalonados y adecuaciones físicas como barreras, ventilación, señalización, instalación de filtros sanitarios y revisión del personal para detectar contagios serán parte del día a día de los empleados una vez que se reanuden las actividades.
