(ESPECIAL)
La rutina, las responsabilidades, las obligaciones y, definitiva, el estrés y las prisas del día, nos tienen en un estado de tensión permanente. A medida que se va acumulando, puede acarrear consecuencias a nivel físico, mental y emocional, desde la apatía y la falta de motivación a la hipertensión o la depresión.
Hace falta detenerse a coger aire de vez en cuando, recuperar esa posición central que debe tener el individuo. Si no nos queremos a nosotros mismos, si no nos cuidamos como es debido, no seremos capaces de cuidar lo que tenemos a nuestro alrededor.
Lo básico es tener una alimentación adecuada, evitar la mala nutrición fruto de las mismas prisas. Muy necesario es también la práctica de ejercicio físico regular y proporcionar al cuerpo el descanso que necesita.
Es fundamental también mantener una actitud positiva, saber controlar las emociones negativas y potenciar lo que hace sentir bien. Es difícil cuando no se tienen las herramientas para hacerlo, pero actividades relajantes como el Reiki, los ejercicios de respiración, la aromaterapia, la meditación o el yoga pueden ser de mucha utilidad.
También es necesario saber establecer prioridades, cuidar aquello que es importante y aprender a eliminar lo superfluo, a dejarlo en un segundo plano, a no prestarle tanta atención. Y eso, a su vez, dejará espacio a lo que sí se debe cuidar, a lo que influye en el bienestar.
La seguridad en el trabajo
Eso sí debería ser una prioridad. No hay nada más importante que la integridad de la persona, ni siquiera a la hora de ponerse a trabajar. El contexto laboral en el que nos desenvolvemos, especialmente para determinadas profesionales, puede someter al trabajador a mucha presión, hasta el punto de perder de vista lo que es importante. Pero no puede haber resultados si quienes deben conseguirlos no tienen unas condiciones mínimas.
Entre enero y septiembre 2017, fueron 461 las personas trabajadoras fallecidas en accidentes de trabajo en España, una cifra que había aumentado un 5% respecto al mismo periodo del año anterior. También creció el número de accidentes con baja en un 5.1%, algo que los sindicatos achacaban, precisamente, a un deterioro de las condiciones del trabajo.
Un obrero de la construcción debe saber que las mejores botas de seguridad deben estar entre su equipamiento básico, junto al casco y otros enseres. Pero no solo se trata de las mejores botas de seguridad en trabajos que impliquen riesgos evidentes, sino de adquirir ciertas posturas y movimientos, buscar el confort acústico y térmico, evitar la fatiga visual, etc.
La empresa es la que debe procurar que los trabajadores cuentan con información específica en cuanto al equipamiento (incluyendo las mejores botas de seguridad), el uso que se le debe dar y, en definitiva, cómo se debe trabajar sin riesgos.
La disposición de los objetos
La seguridad laboral cumple para todo el mundo un papel evidente en la teoría, aunque la práctica hable de irresponsabilidades por parte de la empresa y, en muchos casos, también del trabajador. Hay cosas, sin embargo, que pasan desapercibidas en la teoría y en la práctica. ¿Un ejemplo? La decoración.
El diseño de interiores y la decoración no persigue solo un mero objetivo estético, como muchas personas pueden llegar a pesar. Sus ejes son el aprovechamiento máximo del espacio, de forma que tiene en cuenta elementos como el orden, la armonía y la funcionalidad. Se trata, por tanto, de una disciplina que busca la mejor combinación de objetos, disposiciones, colores o luces.
La decoración y el diseño de interiores influyen en la decoración de un hogar acogedor, que sea un verdadero refugio para las personas que en él habitan, donde pueda cubrir sus necesidades básicas. El hogar cobra un papel incluso más relevante en el caso de niños y adolescentes, porque influye directamente en su desarrollo.
Los dormitorios juveniles de Dicoro sirven de inspiración.
Tus momentos de ocio
Ante la falta de tiempo, se suele recortar aquello que da pereza, como el ejercicio físico; o lo que se considera poco importante, como los momentos de ocio, los que se dedican a las aficiones. No es cuestión de recortar, sino de redistribuir bien el tiempo. Como apuntábamos más arriba: prioridades. Porque todo es necesario, también las aficiones.
De hecho, los pasatiempos son lo único que se practica de manera voluntaria, no obligatoria, simplemente por el placer de hacerlo. Y, por la satisfacción que generan, merece la pena sacar tiempo. La jardinería, las manualidades, las colecciones o las mismas actividades deportivas, se cuentan entre ellos.
Con los años, también han ganado peso los juegos online, como los que se pueden encontrar en friv que, además de proporcionar satisfacción a los aficionados como pasatiempo, tienen otros beneficios propios: mejoran la memoria, la concentración o la capacidad visual, ayuda a la toma de decisiones rápidas, proporcionan un aprendizaje, mejoran el estado de ánimo y la capacidad motora, enseñan valores y principios…
La limpieza
La importancia de elegir buenos profesionales cuando se trata de espacios no particulares o cuando no se puede acometer la tarea de forma que se asegure la calidad de los resultados, es fundamental. Empresas de limpieza hay muchas. Que den garantías, pocas.
La buena limpieza influye de manera positiva en el bienestar porque evita o merma los riesgos de alergias por factores ambientales, como la humedad y el moho, así como por enfermedades acumulación de bacterias y otros agentes patógenos.
Influye también en la imagen que se da del hogar. Nunca se sabe quién tiene que venir a visitarla, si es una vecina, un amigo o alguien que debe personarse en el domicilio con urgencia, para resolver algún imprevisto. El estado del hogar habla de quienes lo habitan, y la suciedad, el desorden o los malos olores no dirán nada positivo.
El caos genera estrés, y la casa da buena cuenta de ello. No es lo mismo tener un revoltijo de ropa en la habitación o una torre de papeles que clasificar cada objeto y colocarlo como es debido, limpio y a punto para ser utilizado.
La limpieza y el orden, por si fuera poco, también nos ponen en movimiento, ayuda a realizar actividad física, aunque sea moderada.
