Se caracteriza por la inflamación de la membrana sinovial de las articulaciones, la cual inicia de manera regular en dedos, manos y muñecas. (ARCHIVO)
La artritis reumatoide (AR) es una enfermedad inflamatoria sistémica crónica que se caracteriza por la inflamación de la membrana sinovial de las articulaciones, la cual inicia de manera regular en dedos, manos y muñecas.
Dicho padecimiento genera en las personas que la tienen, inflamación, dolor en articulaciones, rigidez e hinchazón, asimismo, de manera eventual, se puede tener la pérdida de función en articulaciones, además de la fatiga general y debilidad.
A diferencia de la osteoartritis, que se produce por el desgaste de articulaciones, la AR es una enfermedad autoinmune en la que el cuerpo ataca por error las articulaciones saludables, destacó en un comunicado la farmacéutica, Abbvie.
La mayoría de los pacientes con artritis reumatoide tienen episodios intermitentes de empeoramiento de la actividad de la enfermedad, llamadas erupciones. Los síntomas serán diferentes de cada persona y podrán cambiar a diario.
El texto señala que en algunos individuos, la enfermedad está activa y puede empeorar con el tiempo; mientras que otros muestran períodos donde sienten poca o ninguna actividad de la enfermedad o síntomas.
Los daños en las articulaciones asociados con la enfermedad avanzan de manera constante durante los primeros 20 años, esto representa más de 35 por ciento de discapacidad establecida en este padecimiento.
La AR es simétrica, esto es que cuando una articulación en un lado del cuerpo está afectada, su correspondiente en el otro sector también se involucra. La enfermedad puede causar fatiga, anemia y fiebre de bajo grado.
Otra de las invalideces que causa es que puede conducir a una disminución de la capacidad para realizar tareas cotidianas, como abrir un frasco o girar un picaporte.
No obstante, un diagnóstico temprano, junto con el desarrollo de un plan eficaz de gestión de la enfermedad son importantes en la prevención del daño articular y discapacidad en pacientes con artritis reumatoide.
