(Primera parte)
Estamos en tiempos de falsas e inverosímiles promesas, todos los candidatos de los diferentes y muy variados partidos que existen tan sólo en nuestro Estado, el tercero más grande del territorio nacional compuesto por 32 entidades federativas, y en el caso de Coahuila, con 38 municipios, nos están ofreciendo "la luna y las estrellas", "las perlas de la virgen", como suele decirse, y una serie de "falsas promesas" que ni ellos mismos las creen.
Lo triste, y a la vez, lo bueno, es que ya no creemos en ellos, están hechas por los viejos partidos, dinosaurios de sus partidos conformados todos ellos por falsos políticos enquistados por décadas en ellos, viviendo del presupuesto, pues lamentablemente, no saben hacer otra cosa, fuera de ellos perecen, pero esto es muy relativo, ya que durante los años convertidos en décadas, se han hecho de "sus ahorritos", así es que es difícil decir que vayan a morir de hambre, de inanición, pues todos ellos se han asegurado, no sólo para lo que les reste de vida, sino también, a varias de sus generaciones y que muchas de ellas no van a conocer, dentro de varias décadas, de donde les "llegaron tantas bendiciones", de partidos familiares que han hecho del mismo un negocio sin haber tenido necesidad de invertir absolutamente ni uno de nuestros devaluados pesos, pero ahí se la van llevando, y cuando ya están a punto de perder su nominación por no conseguir ni el mínimo de votos para que no sean borrados de la lista de partidos, realizan sus alianzas entre sí y siguen adelante viviendo del presupuesto.
Entre sus falsas promesas que, como ya es una costumbre muy trillada, nuevamente nos las están repitiendo en esta temporada de campañas, cuando pronto se va a realizar "una limpia" de todos aquellos que ya van cerca de seis y cuatro años en el poder, desde el gobernador, los diputados, tal vez también senadores, los presidentes municipales de los 38 municipios con que contamos y ellos a la vez van a formar nuevos colaboradores, nos están ofreciendo, con una "seguridad asombrosa, con una firmeza en sus discursos", que aún pueden engañarnos y como siempre, nos van a decir que van a mejorar cada uno de nuestros municipios, modernizarlos, urbanizarlos, pavimentarlos, nos van a volver a ofrecer mejores servicios en general, mejorar la seguridad pública, dicen que también habrá "mejor atención médica y hospitalaria" para todos y jamás, de los jamases, "van a volver a faltar los medicamentos" en todos ellos y construir hospitales de tercer nivel que equiparan con "tecnología de punta", cosa que ya no creemos y menos yo como médico, que ya no vamos a tener problema con el abastecimiento del vital líquido, que en todos los hogares de todos los pueblos y ciudades del estado, el agua fluirá a chorros por todas las tuberías, que en las escuelas de todas las categorías no faltarán maestros, de material para trabajar, que los salones de cada escuela van a ser confortables y hasta "con aire acondicionado", que hasta van a imponer como obligatoria la materia de inglés, que van a contratar a jóvenes que han sido deportados de nuestro vecino país y que han aprendido el inglés y serán maestros de "tiempo completo", y me pregunto, ¿traerán consigo los conocimientos pedagógicos necesarios para impartir el idioma?
En fin, decenas de "promesas" que cumplirán tan pronto lleguen a los cargos que ambicionan, pero, a tan sólo pocos días de lograr sus metas, se olvidarán una vez más de ellas, de sus falsas promesas de campaña y volveremos a toparnos con funcionarios prepotentes, indiferentes, que no se dignarán a mirar a la cara a toda aquella larga fila de ciudadanos que tendremos horas esperándolos y mucho menos nos dirigirán aunque sea una falsa e hipócrita sonrisa y esperamos a que nos atienda y que en los días, que serán muchos, que no se presentarán a sus labores, en la mayoría de los casos, sus secretarias nos dirán, como siempre, que están en una junta "muy importante", o bien, fuera de la población tratando "asuntos" que repercutirán en el bienestar de la población.
