Alivio. La empresa de Amado Yáñez toma un respiro ante su precaria situación.
Un juez federal declaró en concurso mercantil a la empresa Oceanografía y ordenó suspender la inhabilitación que le impuso la Secretaría de la Función Pública (SFP) para obtener contratos del Gobierno.
Felipe Consuelo Soto, juez tercero de distrito en materia civil, declaró procedente la petición de la Procuraduría General de la República (PGR) para declarar el concurso de la empresa, intervenida por el Gobierno tras revelarse en febrero que defraudó a Banamex.
Con esta sentencia da inicio el período de un año para buscar la reestructura de la empresa, o de lo contrario será declarada en quiebra.
Sorpresivamente, Consuelo ordenó dejar sin efectos la inhabilitación impuesta por la SFP en febrero pasado, por lo que Oceanografía podrá volver a participar en licitaciones, obtener contratos de Pemex, y resultará mucho más atractiva para eventuales inversionistas.
El juez también ordenó a Pemex reintegrar los montos que, a partir del pasado 28 de febrero, dedujo a la empresa por aplicación de penas convencionales en los contratos aún vigentes.
El juez consideró acreditada la insolvencia de Oceanografía, pues sus deudas totales ascienden a 17 mil 823 millones de pesos, de los que 14 mil 669 millones son deudas vencidas, mientras que sólo cuenta con mil 76 millones de pesos en activos líquidos.
Por el momento, la lista de acreedores incluye a 149 empresas, bancos y entidades de gobierno.
