Desde que inició este torneo Apertura 2015 señalé en diversos espacios que la asignatura principal que tenía el campeón Santos Laguna, era la de hacer una mejor campaña regular ya que la pasada fue irregular y por momentos muy mal jugada, sin embargo, tuvo un gran cierre que le permitió acceder a la liguilla y jugándola de manera magistral se coronó ganador con todo merecimiento. De ninguna manera comparto las visiones exageradas muy simplistas que aseguran que el pasado título fue producto de la casualidad, la suerte en el fútbol puede ayudar una o dos veces pero coronarte cerrando todas las series de visitante no se logra teniendo suerte, asegurar eso es hacer el ridículo como opinador de fútbol.
Las tres derrotas consecutivas que tiene Santos (primera vez que se dan en la era Caixinha) ya tiene inquietos a muchos y no es para menos, de esas derrotas dos fueron en casa pero lo más preocupante en mi opinión, es la manera en que se ha jugado, con muy poco fútbol, fallando pases, con cansancio y con falta de compromiso de varios. Viene una semana muy importante, de esas en las que puedes salir de la crisis o hundirte más, se visita a Querétaro el martes y se recibe al América el viernes próximo. Dos victorias serían lo ideal pero lo menos que se debe conseguir para encarar de manera positiva lo que viene es un empate en la Corregidora y una victoria ante América en casa, eso en cuestión de resultados y de puntos pero también se tiene que ver una mejora en funcionamiento y contundencia, seria alarmante que se fueran cinco fechas otra vez con los delanteros entregando poco, es está próxima semana o todo se va a complicar aún más.
Todos nos tenemos que olvidar del torneo anterior, que todo sea un recuerdo y una estrella más en el escudo santista, de lo contrario será difícil tener la cabeza clara, lo digo para todos los ámbitos que el fútbol acapara. Los jugadores lo tienen que dejar atrás para que su ambición vuelva a ser enorme, el entrenador para dar el mensaje acertado sin aburguesamiento, los directivos para poner mano dura si esto no empieza a funcionar ya, la afición para exigir otra estrella y nosotros los analistas para dejar de decir estupideces, el fútbol se analiza partido a partido, los equipos aunque tengan los mismos nombres, evolucionan, adjudicarle a la suerte el ganar o perder un partido es no saber explicar lo que pasa en la cancha, quienes quieran resurgir de sus cenizas cada mal momento de Santos es porque emplean los resultados a su conveniencia sin entender que el resultado es sólo una parte de un todo que es un partido de fútbol que va más allá de los 90 minutos.
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