Es fundamental que Estados Unidos entienda el riesgo que significa una eventual unión entre el narcotráfico y el terrorismo en la región centroamericana, advirtió el presiente de Honduras, Juan Orlando Hernández.
Entrevistado en el marco de la VI Cumbre de la Asociación de Estados del Caribe, adelantó que ha trabajado con los presidentes de Centroamérica (incluyendo los mandatarios electos de Costa Rica y El Salvador), para enfrentar el tema de la inseguridad.
Explicó que Honduras y su gobierno luchan contra este tema, porque hay un vínculo perverso entre inseguridad y migración. En Estados Unidos, expuso, están “los desplazados de la guerra del narcotráfico en Honduras”.
Y es que, para el mandatario centroamericano, es claro que esa región del mundo enfrenta las presiones del norte consumidor y el sur productor de drogas, pero mientras en Estados Unidos se mira el tema como un asunto de salud pública, “para nosotros es de vida o muerte”.
Tan sólo en el llamado “Triángulo del Norte” (Honduras, Guatemala y Salvador), 80 por ciento de los delitos están relacionados con drogas, lo cual demuestra la importancia de combatir ese problema.
En ese sentido, es fundamental el intercambio de información y buenas prácticas con todos los países de la región, pero también con Colombia y Estados Unidos, para que los gobiernos eleven su eficiencia en el combate a la delincuencia transnacional.
Insistió en que Estados Unidos debe ver a Centroamérica “como su tercera frontera” y ayudar a los países a mejorar sus capacidades institucionales, si bien cada país debe actuar por sí mismo”.
Respecto a México, celebró la reactivación del Grupo de Alto Nivel y la disposición del país para que Honduras abra cuatro nuevos consulados en territorio mexicano, ubicados en la llamada ruta del migrante.
El presidente de Honduras insistió en que no se debe perder de vista la relación entre migración y delincuencia y reconoció también que grupos delictivos mexicanos sí tienen presencia en Honduras y, en general en Centroamérica.
En todo caso, insistió en la importancia de mantener una unidad como bloque para lograr una interlocución de más peso con Estados Unidos.
