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Somos más 'piratas'

A la venta ilegal de discos en la calle se suma la que sucede en internet: 4.5 millones de mexicanos bajan música sin pagarla. Y en discos físicos, el desplome en ventas es de 81%

AGENCIAS

Es un vicio que cambió de plataforma: la "piratería" de música ha pasado de las calles a Internet. De acuerdo con una estadística de la Asociación Mexicana de Productores de Fonogramas, 4.5 millones de mexicanos han sido "piratas" musicales digitales, es decir, bajado canciones de manera ilegal a sus gadgets o computadoras.

"La afectación de la piratería es enorme; sabemos que no vamos a poder terminarla, pero necesitamos acuerdos para proteger los derechos de autor", asegura en entrevista Gilda González, directora general de Amprofon. Hace un lustro parecía que Internet salvaría a la industria de la música establecida del disco físico, agobiado por la piratería. Pero la venta legal en Internet no ha ocupado el lugar que hace dos décadas tenía el álbum físico.

La debacle comenzó hace más de una década de acuerdo con los datos de Amprofon, de 2000 a 2013 la caída de la venta de discos ha sido del 81.1%. Y el "salvador digital" no ha llegado, por lo menos no a México. De los 45 millones de personas con Internet sólo 4% baja música legal, es decir, 1.8 millones de mexicanos. Entonces, musicalmente, son más los mexicanos "piratas" que los legales. La cifra también da una idea del raquítico mercado mexicano en comparación con el promedio global, en donde, según la Federación Internacional de Industrias Fonográficas (IFPI), 33 por ciento de los cibernautas consumen música en la red.

En México Se calcula que la piratería es de más de 6 mil millones de canciones "piratas" anuales. Pero en la estadísticas de Amprofon, el dato que más alarma es el del nivel económico al que pertenecen los "piratas digitales": más de la mitad son de los niveles con más ingreso, A, B y C. Y va en crecimiento porque en 2010 representaban 54% y crece un 2% cada año.

Para el vicepresidente ejecutivo de la Sociedad de Autores y Compositores de México, la explicación es meramente cultural: "Seguirá sucediendo en tanto no se regule (con una ley) quitando la confusión de que libertad es igual que gratuidad. Como bajan todo gratis, entonces el compositor tiene el peligro de morir de hambre", dice el cantautor Martín Urieta.

Para Sabo Romo, ex bajista de Caifanes, el problema es una cuestión de educación, cuya única solución es la de crear conciencia en las nuevas generaciones acerca de la importancia de pagar al creador por su obra. "Tiene mucho que ver con el hecho de que la gente se habitúa a esto, a robarse la música, no es que una la quiera regalar, sino que siempre aparecerá la manera de encontrársela de manera gratuita. Tenemos que convencer al joven de que el ser compositor o músico, es un oficio tan respetable, como ser médico o arquitecto".

La estadística le da la razón. Al preguntar por qué descarga contenidos de manera ilegal, la mayoría de los encuestados por Amprofon da un argumento simple: "Porque me gusta", contestó 52%, según el registro de 2011.

Érika es una de las cibernautas que tiene como práctica la descarga ilegal. O, como ella prefiere decir, gratuita. "No vale la pena comprar un disco porque al final del día sólo cuatro o dos me gustan. Y ya en lo digital, es un exceso pagar 12 pesos por una canción en iTunes". Erika tiene 3 mil canciones en su computadora. "Es lo que he acumulado desde la prepa", dice esta joven de 24 años.

Contribuye así a las 745 millones de descargas ilegales anuales que registra Amprofon.

 LA MÚSICA DIGITAL VA LENTA EN MÉXICO

El valor mundial de la música grabada (sumada la física y digital) creció 0.3% en 2012, el mejor resultado desde 1998, señal de que está mejorando. Pero no en México donde las ventas en internet no ha compensado la caída del formato físico, cuyas ventas en 2013 ascendieron a mil 886 millones de pesos; una baja de 3% respecto a 2012.

"Sí han bajado las ventas físicas, no mentiré; de vender 550 mil físicos por artista, ahora estamos en 60. Hay una caída muy fuerte de la industria en este aspecto", dice Gilda González, directora general de Amprofon.

Por estas cifras es que el director general de la SACM, Roberto Cantoral Zucchi, considera que la industria del disco físico en México está cada vez más cercana a la extinción. "Ya nadie compra discos, muy pocos, todo mundo lo baja del entorno digital y gratis ¿de qué vamos a vivir los autores?, ¿De qué va a vivir la industria si no se respeta el derecho de autor?".

A finales de 2013, miembros de la SACM, entre ellos Armando Manzanero y Roberto Cantoral, estuvieron presentes cuando el Partido Revolucionario Institucional en la Cámara de Diputados presentó una iniciativa de reforma a las leyes de la Propiedad Industrial y Federal del Derecho de Autor y al Código Penal. En ella se plantean diversos puntos: sancionar y perseguir a los usuarios que descarguen música en sitios ilegales, ordenar el cierre de esas páginas, alertar a los usuarios de correo electrónico y redes sociales sobre ellas, y cancelar las cuentas que se utilicen para descargas clandestinas.

"Estamos luchando para que los sitios ilegales se quiten de internet y se queden nada más los legales, tanto nacionales como extranjeros", dice Cantoral Zucchi. Algunos especialistas afirman que los servicios digitales y la rápida expansión de la audiencia hará que la industria reviva. "La tendencia es que en tres años nos movamos a nuevas plataformas junto a países desarrollados siempre y cuando el gobierno haga su trabajo en la parte digital", dice González.

Pero ¿qué se necesita para que la industria florezca en México?

Para la directora de Amprofon, el gobierno debe prestar más atención al acceso digital para que llegue a todo el país.

El que en México menos de 44% de los hogares tenga acceso a la web hace que comprar discos físicos de manera informal todavía impere y que la venta digital apenas figure. En 2012, del total de música vendida 35% era digital y 75% física. En 2013 fue de 50/50.

El mayor problema, en palabras de Gilda González, es que el mercado digital no está a la par del físico. "La falta de internet en los hogares mexicanos ha impedido que la industria streaming (en vivo) no sea tan popular como en EU", dijo.

DISCO FÍSICO, A LA BAJA

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Shakira.

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