Congregación. Manifestantes prorrusos asisten a una protesta en el centro de Kharkiv, para exigir la autonomía de Kiev.
Ucrania y Rusia se culparon mutuamente por un tiroteo en un retén controlado por insurgentes prorrusos en el este ucraniano.
No se supo de inmediato la identidad de los atacantes. Moscú culpa a nacionalistas ucranianos mientras el gobierno de Kiev dice que el ataque cerca de la ciudad de Slovyansk fue protagonizado por provocadores extranjeros.
El choque al parecer es el primero desde la concertación la semana pasada de un acuerdo internacional en Ginebra para reducir las tensiones en el este de Ucrania, donde partidarios prorrusos han ocupado edificios de gobierno en al menos 10 ciudades.
Ucrania y muchos en Occidente temen que este tipo de enfrentamientos puedan dar un pretexto a Rusia para capturar más territorio ucraniano.
Rusia tiene decenas de miles de soldados apostados en su frontera con Ucrania. El presidente Putin y otros funcionarios dijeron en un principio que los soldados estaban ahí para hacer ejercicios militares, pero el viernes el portavoz reconoció que algunos están ahí debido a la inestabilidad en el este de Ucrania.
Piden fuerzas
El autoproclamado "alcalde popular" de la localidad ucraniana de Slaviansk, Viacheslav Ponomariov, pidió al presidente ruso, Vladímir Putin, que despliegue fuerzas de pacificación en las regiones orientales de Donetsk y Lugansk.
Las fuerzas de paz rusas defenderían a la población de la Guardia Nacional y de la organización ultranacionalista Sector de Derechas, aseguró el líder.
"Están matando a nuestros hermanos. No hablan con nosotros, sólo nos matan. La ciudad está en estado de sitio por parte del Sector de Derechas", dijo.
