Un extraño caso se registró en un restaurante de comida rápida de Phoenix, Arizona, cuando un sospechoso no dejó ser esposado por dos policías y terminó golpeándolos.
Los empleados del establecimiento habría notificado a la policía de Arizona que un extraño hombre había ingresado al local, por lo que un par de agentes arribaron al sitio para revisar la situación.
Pero cuando los uniformados se disponían a detener al sospechoso, éste no se dejó y con cierta facilidad logró liberarse para después golpear a ambos, a pesar de que le habían disparado con una pistola eléctrica.
La reyerta terminó en el estacionamiento del restaurante, cuando después de varios minutos porfin controlaron al revoltoso.
El portal Leave Like informó que horas más tarde Edward Caruth, el detenido, murió de camino al hospital, desconociendo las causas de ésta.
Los agentes fueron golpeados por el sujeto detenido. (YouTube)