En artículos anteriores de esta columna se han planteado las bases para afirmar que existe suficiente disponibilidad de agua en la región para el abasto actual y futuro a la población del valle de la Comarca Lagunera.
En otros años, al llegar la época de calor e incrementarse la demanda de agua en las ciudades de la zona conurbada, se han presentado casos de desabasto de agua en algunas colonias, lo que se ha atribuido a una supuesta escasez de agua en la región. Sin embargo, dicho desabasto se ha debido a deficiencias en la operación de los pozos y redes de distribución de los sistemas municipales de abastecimiento de agua.
Ya se percibe el inicio de la temporada de calor y es indudable que la demanda de agua se irá incrementando con la temperatura hasta alcanzar su máximo valor en mayo y junio de este año. Es responsabilidad de todos los sistemas de agua de la Comarca Lagunera garantizar el abasto de agua durante los próximos meses de alto consumo, por lo que los organismos operadores se deben estar preparando, realizando en forma rigurosa acciones de mantenimiento de toda la infraestructura hidráulica (pozos, tanques, redes), para ofrecer un abasto adecuado y evitar que se presenten fallas que pudieran provocar escasez en algunas zonas.
Actualmente se observa que existe preocupación por incrementar la capacidad de suministro de agua con nuevos pozos que permitirán enfrentar en el corto plazo el aumento en la demanda, mientras se continúa avanzando en la reducción de las pérdidas por fugas, para lograr en el mediano plazo cubrir la demanda con menores extracciones en los pozos.
En Torreón se han reportado recientemente varias perforaciones con resultados muy favorables en cuanto a la producción de agua. Si bien la construcción de estos pozos ha sido necesaria, el contar con más pozos no es suficiente para garantizar un buen abasto, ya que adicionalmente se requiere mejorar la operación y las condiciones físicas de las líneas de conducción y redes de distribución, mediante la sectorización hidráulica de los sistemas para suministrar suficiente agua con presión apropiada.
La sectorización hidráulica consiste en independizar circuitos en las ciudades para controlar los flujos y presiones en las áreas de influencia de los pozos y tanques, subdividiendo las redes de distribución en segmentos más pequeños, que sean más fáciles de controlar y optimizar su operación, para poder proporcionar un buen servicio a todos los usuarios y para contribuir a reducir las pérdidas por fugas.
El seccionamiento del sistema permite operar cada área de manera independiente y hace posible la interconexión de los sectores mediante válvulas, al mismo tiempo que facilita la reparación de las tuberías cuando se presentan fallas en algunas zonas.
Otra contribución importante de la sectorización es el control de la facturación de los consumos reales de agua, ya que facilita comparar los volúmenes suministrados de agua en cada sector con los volúmenes consumidos (facturados o no). Dicha comparación permite detectar diferencias originadas por fugas, tomas clandestinas y/o deficiencias en el proceso de medición-facturación de consumos de agua.
Cabe mencionar que en el sistema urbano de Torreón ya se ha avanzado mucho más que en otros sistemas de la Comarca Lagunera en la sectorización hidráulica de las redes y se cuenta con tanques para regular las variaciones horarias de las demandas de agua. Esta situación facilita la incorporación de acciones adicionales para mejorar el servicio a todos los usuarios.
