Una de las ventajas de este tipo de aparatos es que permite comparar los resultados obtenidos a lo largo del tiempo, ya sea en relación con uno mismo, o con otra persona debido a la acuciosidad con que mide. (ARCHIVO)
Tener una medición del tiempo con precisión era una facultad muy requerida, pero gracias a un invento que supo llegar oportunamente, esto fue posible en el momento justo.
Dicho invento es el cronómetro, un reloj mecánico de alta precisión certificado por institutos o centros de control y que se utiliza para medir el transcurrir del tiempo con exactitud.
"Una de las ventajas de este tipo de aparatos es que permite comparar los resultados obtenidos a lo largo del tiempo, ya sea en relación con uno mismo, o con otra persona debido a la acuciosidad con que mide. Todos entregan los datos con las centésimas de segundo, y algunos también pueden entregarlos con las milésimas de segundo", señala la página cronometros.com.mx
Fue a principios del Siglo XIX cuando Louis Berthoud, un relojero suizo, lo desarrolló por primera vez oficialmente, gracias al perfeccionamiento del sistema de cuerda.
Sin embargo, cabe señalar que existen algunas versiones que indican que el también relojero suizo George Graham, quien vivió entre los años 1673 y 1751, había usado ya la palabra cronómetro en referencia al funcionamiento de un mecanismo similar de un reloj de péndulo pequeño y portátil.
Es importante saber, también, que previo al cronómetro de Berthoud existieron otros instrumentos de medición similares, los cuales eran utilizados por los marinos y que se desarrollaron entre 1763 y 1761.
Finalmente, debe conocerse que el cronómetro de pulsera fue diseñado por el fabricante Rolex, pero ya hasta el año 1910.
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