Operación. De acuerdo a la Coneval, la Cruzada Nacional contra el Hambre tiene inflexibilidad en las reglas de operación.
La inflexibilidad de las reglas de operación y la poca claridad en la interlocución de los órganos que ha creado, son algunos de los obstáculos a los que se ha enfrentado la Cruzada Nacional contra el Hambre.
Lo anterior de acuerdo con la actualización del primer diagnóstico del diseño e implementación de la Cruzada del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
El organismo analizó la Comisión Intersecretarial conformada por 16 dependencias federales, otras tres comisiones locales, los comités comunitarios de tres puntos rurales de Guerrero, y uno más en la colonia Simón Bolívar, de Acapulco.
De este último, advirtió que el ambiente de inseguridad ha inhibido la participación de las dependencias, mientras que en las zonas rurales identificó que los ciudadanos están interesados en tener mayor incidencia, pero sienten que requieren más capacitación o interlocución con las dependencias, por lo que terminan limitándose a supervisar e informar a la población lo que está haciendo la Cruzada.
El Coneval reconoció a la Comisión Intersecretarial como el órgano mejor integrado, aunque en los seis grupos que se ha dividido para atender temas específicos (empleo, alimentación, salud, servicios básicos, participación social y producción agropecuaria) se tienen avances diferentes.
Y es que temas como sustentabilidad, equidad de género y participación social no están siendo incluidos como parte de acciones integrales.
El estudio señala que no se ha visto que a esta Comisión se integre el trabajo y propuestas del Consejo Nacional, conformado por organizaciones sociales, ni del Comité de Expertos, como establecen sus lineamientos.
16
SECRETARíAS
Conforman el organismo intersecretarial del gobierno.
Archivo