Malestar. Pacientes de la Clínica 71 del IMSS denunciaron la suspensión de la radiación por la descompostura de un aparato.
Desde el pasado viernes está descompuesto el acelerador lineal, un sofisticado aparato con el que cuenta la Clínica de Especialidades número 71 del Seguro Social para tratamiento radiológico de pacientes con cáncer, que comenzó a operar este año con un costo superior a los 10 millones de dólares.
Al menos 14 personas que estaban programados para recibir sus radiaciones vieron suspendido el tratamiento, lo que causó su malestar, pues además de esto, aseguran que nadie tuvo la atención de explicarles las afectaciones que les puede causar.
— ELENA, Paciente
"Nadie nos ha dicho cómo va a perjudicar nuestra salud porque el oncólogo salió de vacaciones y no hay nadie que se quede al frente", dijo 'Elena'.
SE QUEJAN
Los afectados ayer se citaron en la Clínica de Especialidades para hablar con el director médico, José Luis Cortés Vargas para solicitar información, pero sólo acudieron tres.
El representante dijo que el aparato, del cual sólo existen seis en el país, fue fabricado en el extranjero, por lo que las piezas que requiere se mandaron traer desde Alemania y llegarán el lunes de la próxima semana.
Dijo que cree, que los pacientes pueden o no sufrir afectaciones, pues las citas se respetan por el orden establecido ante la alta demanda, sin embargo, les dijo que sólo el especialista podría despejar sus dudas ante lo cual puso a un oncólogo a disposición de los interesados.
Según los pacientes, la atención dada por el director médico, fue buena, pero no resolutiva.
"Cómo nos dice que no va a haber afectaciones, él cree, pero si te programan cierta periodicidad no es nada más para que entre y salga gente, en ese caso las pastillas y lo demás te lo tomarías a la hora que quisieras para curarte", dijeron. Comentaron que esperarán a que el aparato sea reparado para ver si realmente no afectó la suspensión del tratamiento. El acelerador lineal cuenta con rayos X de alta y baja energía, lo que permite destruir células tumorales con una mayor especificidad en la entrega de dosis en cualquier región del cuerpo.
Pese al costo y su recién entrada en operación no es la primera vez que se descompone.
