La Secretaría de Hacienda (SHCP) detectó casos de fraude carrusel, o una simulación de contratos, en los que se habrían lavado hasta tres mil 700 millones de pesos.
Derivado de esto, elementos de la Procuraduría General de la República (PGR) capturaron a los empresarios Carlos Ambé Buzalí y Jacobo Husny Hanono.
El primero de ellos se encuentra arraigado en el Centro de Investigaciones Federales de la Colonia Doctores en la capital del país; el segundo fue encarcelado en el Reclusorio Norte y luego liberado bajo fianza.
De acuerdo con varios informes federales, la Unidad de Inteligencia Financiera de Hacienda y la Procuraduría General de la República investigan ocho empresas probablemente vinculadas con Ambé.
Entre los años de 2010 y 2013, estas compañías habrían registrado movimientos de 3 mil 700 millones de pesos en cuentas de más de 35 países.
De acuerdo a los informes recabados, a principios del mes de noviembre, Ambé fue detenido en la colonia Polanco, en el Distrito Federal junto a su chofer, pues este último supuestamente aparecía como socio mayoritario y representante legal de las empresas que movilizaban el dinero en las cuentas financieras.
En una indagatoria distinta, la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) aseguró 70 millones de pesos a Husny.
Este personaje es acusado de usar diversas identidades para defraudar a las autoridades recaudatorias.
El empresario Husny Hanono fue detenido en la primera semana de noviembre en un operativo de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada en Polanco y luego arraigado, durante casi un mes, por Martín Santos Pérez, juez segundo especializado en medidas cautelares, con base en la orden judicial 525/2013.