Los más de 40 diputados de izquierda que se apoderaron del pleno del Palacio Legislativo de San Lázaro se levantaron y decidieron liberarlo poco antes de las 13:00 horas.
Después de casi un día que se mantuvo cerrado el Pleno, los legisladores retiraron algunas mantas de la presidencia de la Mesa Directiva y se dirigieron al pleno alterno, en el edificio E, para votar las reservas de la reforma energética.
Los legisladores anunciaron una estrategia jurídica para echar abajo la reforma energética.
De manera paralela anunciaron una estrategia en todos los congresos locales para realizar cercos e impedir su aprobación.