Poco antes de las 15:00 horas de este martes, Andrés Manuel López Beltrán, hijo de Andrés Manuel López Obrador, arribó a las afueras del Senado y realizó un recorrido por las carpas que aún están instaladas, aunque con menor presencia de simpatizantes que otros días.
En el cerco se encuentran también Héctor Vasconcelos, Clara Brugada, Marco Medina, entre otros dirigentes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que se manifiestan contra la reforma energética.
Ante la presencia de un contingente de maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), granaderos de la Secretaria de Seguridad Pública reforzaron por fuera de las vallas metálicas que resguardan el Senado.
Los uniformados, con cascos y escudos se apostaron por fuera en un tramo de la valla metálica de alta seguridad, en las inmediaciones de Reforma y París, luego de que un grupo de hombres con un bloque de concreto golpeó parte del cerco y estuvo a puno de vencerlo, lo que finalmente no ocurrió.
Se espera que en unas horas más tarde, cuando se apruebe en el Pleno del Senado la totalidad de la reforma energética y se le dé curso a la Cámara de Diputados, el cerco se traslade a San Lázaro.
Martí Batres, líder nacional de Morena, pidió este mediodía mantener este martes el séptimo día de cerco pero estar atentos a trasladarse a San Lázaro.
"No sabemos a qué hora termine, dependiendo de ello decidiremos qué hacer. Si hoy se consuma el atraco, la infamia en el Senado, en el momento en que eso suceda haremos una declaración política y nos trasladaremos a San Lázaro y anunciaremos tiempos y formas para el traslado", indicó.
Habrá una forma creativa de lucha contundente, si se consuma el atraco, y advirtió que "la reforma 21 se cae porque se cae".
