Un atleta puertorriqueño que desapareció el domingo tras su participación en el IronMan Cozumel, fue rescatado por las autoridades luego de sufrir un secuestro virtual, informaron autoridades policiales.
En conferencia de prensa, en la que estuvo el triatleta José Ramírez, de 72 años, el director de la Policía Judicial del Estado en la zona norte, Marco Antonio Sánchez Sánchez, informó que éste llegó a la isla el 27 de noviembre para participar en la prueba.
Agregó que el deportista se hospedó en el hotel Flamingos, donde fue visto por última vez el pasado domingo.
Por su parte, el triatleta dijo que tras concluir su participación en la prueba, regresó a su hotel, se bañó y habló con sus familiares vía telefónica hasta Las Vegas, para posteriormente recibir una llamada telefónica.
Indicó que en la llamada, un sujeto se identificó como integrante del grupo de “los Zetas” y mediante engaños le ordenaron que pusiera ropa en dos bolsas y saliera del hotel o de lo contrario entrarían por él.
Ramírez mencionó que obedeció las indicaciones, además de que compró un celular con el que mantuvo contacto todo el tiempo con sus presuntos captores.
Sánchez Sánchez mencionó que el lunes por la tarde recibieron una llamada desde Las Vegas, de familiares de José Ramírez, denunciando que recibieron amenazas de muerte vía telefónica, que les pedían dinero y que además no podían comunicarse con el atleta.
Dijo que ante esta situación, policías municipales fueron a buscarlo al hotel pero no lo encontraron y que personal informó que lo vieron entrar, pero ya no salir de la habitación que ocupaba.
Ante ello, explicó que la Procuraduría y la policía municipal implementaron un operativo de búsqueda y rescate, en el cual se verificaron las cámaras de vigilancia, los muelles, así como el aeropuerto, donde se constató que aún se encontraba en la isla.
Los policías revisaron los hoteles de Cozumel, donde averiguaron que estuvo hospedado en el Kary, pero ya lo había dejado, por lo que continuaron su búsqueda, hasta que lograron localizarlo hoy en el hotel Pepita, pues un empleado lo reconoció, pero se encontraba registrado bajo otro nombre.
En su relato, Ramírez indicó que se asustó, que acató todas las indicaciones que sus secuestradores virtuales le dieron, pues ya habían hablado con su familia, a quienes también amenazaban.
Por su parte, la coordinadora de Ministerios Públicos, Estela Tun Pech, manifestó que se abrió un acta circunstanciada, además que interpusieron una denuncia por el delito de extorsión y secuestro contra quien resulte responsable.
