Crisis. El anuncio lo dio Gustavo Madero.
La crisis en las filas del PAN se acentuó aún más.
Gustavo Madero anunció ayer que la elección del nuevo dirigente del blanquiazul, prevista para la primera semana de marzo, se aplazará hasta el segundo trimestre del próximo año.
Madero hizo pública ayer la decisión como consecuencia del "incidente" que el sábado pasado forzó -por falta de quórum- la suspensión de los trabajos del Consejo Nacional, cuyos integrantes se aprestaban a preparar el reglamento que normará la hoy pospuesta elección.
La decisión suscitó el inmediato respaldo de uno de los cuadros más cercanos a Madero, el diputado Luis Alberto Villarreal - "hay Madero para rato", dijo-, pero también la inconformidad de los opositores a su liderazgo, que no sólo le exigieron que convoque cuanto antes al Consejo, sino también que presente su licencia al cargo de presidente del Comité Ejecutivo Nacional, cuyo período debía concluir mañana miércoles 4 de diciembre.
El tabasqueño Juan José Rodríguez Pratts apremió a Madero a dejar las riendas del CEN. "Le pediría a Gustavo que se vaya. Cecilia Romero (actual secretaria general) puede hacer mejor las cosas al frente del partido", planteó.
Por separado, el precandidato Juan Manuel Oliva y el diputado Max Cortázar --representante de otro de los contendientes, Ernesto Cordero--coincidieron en pedir a Madero que cite cuanto antes al Consejo Nacional para que este órgano concluya la elaboración del reglamento de la elección.
