La práctica católica del exvoto, ofrendas que los fieles suelen usar para solicitar o agradecer la intervención divina, lejos de desaparecer se ha mudado al internet.
De los cirios benditos, los fieles pasaron a las velas virtuales; de los retablos en madera para agradecer los favores recibidos a publicaciones en Twitter, Facebook y blogs; de las peregrinaciones a santuarios de larga tradición católica a las visitas a páginas virtuales.
María Cristina Guirette, miembro de la Red de Investigadores del Fenómeno Religioso en México
"Se sigue practicando. Es la necesidad de hacer patente un agradecimiento, porque es un compromiso que se adquiere con el santo o la Virgen.
"Actualmente hay ciberexvotos en Twitter, Facebook y blogs. En un inicio, la función de la tradición votiva era agradecer y, a diferencia de ello, el ciberexvoto es muy utilizado para pedir", detalló.La práctica se ha modificado, antes las personas que mandaban a hacer pinturas, ahora cualquiera puede agradecer a través de la red. Asimismo, los exvotos tenían que acudir al santuario hoy basta con tener acceso a la red.
"Los migrantes que están en Estados Unidos y no pueden regresar al país agradecen (por medio de internet) los milagros (...) El exvoto sigue teniendo la misma vigencia, pero que está respondiendo a necesidades posmodernas", explicó la académica. En la web, la práctica se hace a veces al margen de las instituciones católicas.
Por ejemplo, fieles de México ocupan el tercer sitio de demanda -seguido de los de España y Colombia-, en una popular página comercial de velas virtuales.
A la fecha van casi 23 mil "encendidas" en el sitio Pon una vela.Otro caso es el del Santuario de Plateros en Zacatecas en donde se venera al Santo Niño de Atocha, que abrió su página oficial en 2012, éste suma 2 mil seguidores, mientras que un perfil en Facebook abierto por un devoto particular desde 2010 lleva cerca de 150 mil.
Miguel Ángel Sánchez Carlos, investigador del Departamento de Ciencias Religiosas de la Universidad Iberoamericana, explicó que la religión se está reconfigurando y una característica importante es la desinstitucionalización de ésta y su privatización.
"Ya no es ni la gran institución ni el gran sacerdote ni el gran líder consagrado el que se extiende o el que difunde más, sino que ahora ya la gente, desde su propio ser, expresa fe vive su fe y ofrece alternativas. En internet se refleja y más gente va ir recurriendo a este medio para compartir sus experiencias religiosas", aseguró.
Para Hugo Valdemar, vocero de la Arquidiócesis de México, este tipo de religiosidad es preocupante porque puede originar un individualismo que no comulga con la fe cristiana.
"Las redes conducen a un individualismo a un aislamiento que no va con la fe cristiana que siempre nos pide que la relación con Dios. No puede ser individualista, no puedo ser solo yo y Dios, sino que tiene que estar en relación con los hermanos, con la comunidad, con la Iglesia ", indicó.
Dijo que además se corre el riesgo de que se convierta en una práctica superficial, sin fondo, sin profundidad e incluso supersticiosa.
Para el sacerdote, más que juzgar o condenar esta práctica, la Iglesia debe orientarla, aunque hasta el momento la Iglesia no cuenta con ninguna estrategia para ello.
SIGUEN MILLONES AL PAPA El Papa Benedicto XVI fue el primer Pontífice en abrir una cuenta en esta red social, cuando la cerró en febrero de 2013 tenía más de un millón y medio de seguidores, ahora al Papa Francisco lo siguen 3.7 millones de personas.
