Dictamen. La ASE señala en dictamen 'el desdén con el que los funcionarios de la administración saliente realizó estos proyectos'.
Según los resultados de la auditoría por excepción realizada en 2010 por la ASE, para que los megatanques instalados en la administración municipal de José Ángel Pérez pudieran funcionar, se necesitaría gastar entre 500 mil y un millón de pesos en "obras complementarias para cumplir sus objetivos de cada uno de ellos''.
La Auditoría Superior del Estado (ASE), además requirió a la gerencia general del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas) en la pasada administración que presentara un dictamen técnico del análisis de las licitaciones públicas realizadas en el lapso del 2006 al 2009, cuando se colocó la mayoría de los equipos.
La instalación de los megatanques en la ciudad, que inicialmente serían 17 de acuerdo con el proyecto anunciado originalmente, significaría una inversión de alrededor de 100 millones de pesos. Fue una de las principales acciones del gobierno de José Ángel Pérez a través del Simas y con lo que prometieron terminar con el problema de la falta de agua potable en los sectores sur y oriente de la ciudad, desde entonces y hasta ahora los más afectados por la falta de suministro, sobre todo en la temporada de calor.
La ASE revisó los megatanques Ampliación La Rosita, Campestre La Rosita, Valle Dorado y Fuentes del Sur. Tan sólo de ellos señaló que sería necesario aplicar una inversión de 10 millones para ponerlos en operación. No los encontró funcionando.
En un párrafo de su dictamen, del cual El Siglo de Torreón tiene una copia, señala "el desdén con el que los funcionarios de la administración saliente realizó estos proyectos".
En la anterior administración municipal, el gerente del Simas era Alberto Díaz de León; el contralor general, Petar Entchev Petrov, y el gerente técnico, Luis Horacio Salmón, quien avaló la instalación de los equipos para almacenamiento del agua y junto a José Ángel Meléndez, en ese entonces encargado del área de Planeación, supervisaron la obra de cada uno de ellos.
LICITACIONES MANIPULADAS
Por citar uno de los casos que enumera la ASE, está la licitación de 2006 con registro 35302001-023-06, que corresponde a la compra de un tanque con capacidad de 700 metros cúbicos adjudicado a Martha Reyes Delgado. Esta persona participó y ganó por lo menos cinco licitaciones, pese a que no entregó la documentación idónea que avalara ni su experiencia ni solvencia económica.
La irregularidad detectada es que de la documentación analizada, no se encontró dictamen técnico previo en el cual justifique la utilidad y beneficio que se obtendrá con la instalación de dicho tanque. Además, a la entrega de propuestas se registró una persona moral y Reyes Delgado, pero a la Junta de Aclaraciones no se presentó el otro participante ni entregó más documentación por lo que al contrato se le adjudicó a ésta, aunque hasta 48 días después entregó la documentación requerida.
En la revisión de varias licitaciones, la ASE señala la violación a la Ley de Adquisiciones y Arrendamientos del Sector Público, la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos del Estado.
SECTORIZACION CON IRREGULARIDADES
La ASE cuestionó el dictamen técnico mediante el cual se hizo en primer término la sectorización de la ciudad para efectos del abasto de agua y lo que se tomó como base para la colocación de los megatanques.
Indica en el dictamen que varios megatanques fueron colocados en sectores donde los pozos son muy distantes como para que se llenen de agua y cumplan operativamente.
Y concluye que el proyecto de los megatanques "se puede configurar como un proyecto global que trae como consecuencia un detrimento patrimonial para la entidad del Simas Torreón, por la adquisición de tanques de mayor volumen de regulación y almacenamiento, y que obviamente tienen un mayor costo y, por lo tanto, existió mayor gasto con afectación de los intereses económicos de la entidad (…) por lo tanto existe un daño patrimonial que afecta la hacienda pública".
En la actualidad, de un total de 19 megatanques instalados, cuatro de ellos por fraccionadores, siete no funcionan, seis lo hacen a un 50 por ciento y seis funcionan bien, según el Simas.
