Robo. El Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi sufrió recientemente el robo de unas computadoras con información confidencial.
Organizaciones ciudadanas manifestaron su solidaridad al Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi y Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila (FUUNDEC), y llaman a unirse para construir la paz en una región lagunera que consideran "vejada y adolorida, pero de pie y con la cabeza levantada con gran dignidad".
El Centro Juan Gerardi, institución que ha trabajado en apoyo a migrantes y a familiares de personas desaparecidas, entre otras actividades, sufrió recientemente el robo de computadoras con información confidencial y delicada, sin que se esclareciera quiénes fueron los responsables de este delito.
Pero en los últimos años, han sido víctimas de diversos ataques, como la entrada de policías y elementos del Ejército a sus oficinas en febrero de 2012. También ingresaron a la parroquia de San Judas Tadeo y se interpuso una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos, pues se revisaron hasta las criptas, a pesar de que los agentes no presentaban ninguna orden judicial, sin se identificaron ni solicitaron permiso para entrar. Al no encontrar nada, se salieron.
Antes de esto, el presidente del Centro, Chuy Torres (qepd), fue detenido por una patrulla, quienes lo bajaron de su automóvil y lo llevaron a "dar la vuelta", pero al regresar encontró un vidrio de su vehículo roto y su computadora había desaparecido, también con información importante.
Para el grupo Laguneros por la Paz, la atención a personas vulnerables y heridas es una noble labor, que merece ser alentada, apoyada y protegida, sin embargo, la semana pasada en Torreón, en casa de una familia de FUUNDEC, un grupo de jóvenes platicaban y cenaban en una cochera después del juego de futbol, cuando pasaron unas patrullas por la calle. Más tarde regresaron junto con un vehículo negro, donde iba el jefe de la Policía, por lo que los jóvenes prefirieron entrar a la casa, a donde fueron seguidos por los policías, que rompieron y dispararon varias veces, hiriendo de un balazo a un muchacho en la ingle.
Tras el incidente, los jóvenes desaparecieron hasta que, después de pesquisas intensas en diversas instituciones, se encontró a 2 en la cárcel municipal y a 2 más, que fueron liberados de la Procuraduría de Justicia del Estado. Ante esto, la Policía manifestó una postura de respeto y apertura, y aseguró que están dispuestos a la revisión del tema. En su versión, indicaron que se repelió una agresión y se aseguró un arma de fuego.
