Negativa. La Corte Suprema rechazó ayer una medida que obligaba a las personas de Arizona a presentar una prueba de ciudadania cuando se registraban para votar.
Activistas de Arizona calificaron de "paso positivo" la decisión anunciada por la Corte Suprema de rechazar una medida que obligaba a los ciudadanos de este estado a presentar una prueba de ciudadanía cuando se registraban para votar. "Aplaudimos esta decisión, esto nos da oportunidad de registrar a más latinos", dijo Raquel Terán, directora de Mi Familia Vota en Arizona.
Esta organización dedicada a promover el voto latino estima que en Arizona hay más de 300 mil hispanos que son elegibles para votar y que aún no se han registrado.
Con una votación de siete a dos, el Tribunal Supremo determinó que el estado de Arizona no puede obligar a sus residentes a presentar pruebas adicionales de su ciudadanía cuando se registran a votar utilizando el formato universal establecido por el Gobierno federal, el cual puede ser utilizado en todos los estados.
En 2004, los votantes de Arizona aprobaron la Proposición 200, la cual exige prueba de ciudadanía cuando una persona se registra para votar, como es una licencia de conducir expedida por este estado o el acta de nacimiento. La regulación también pide prueba de identidad al momento de acudir a las urnas.
Esta ley se estableció con el propósito de evitar que personas que no cumplen con ciertos requisitos, como los inmigrantes indocumentados, se registren para votar, aunque el estado nunca ha podido presentar pruebas contundentes que comprueben sus alegaciones.
Terán explicó que la decisión del Tribunal Supremo sólo se aplica cuando la persona se registra para votar utilizando el formulario federal, si se usa el estatal, estos requisitos seguirán vigentes.
MIL
Hispanos son elegibles para votar y que no han sido registrados.
