Diversas reacciones generaron las afirmaciones del secretario del Ayuntamiento, Alfonso Tafoya, contra el programa “Transforma” presentado por el gobierno del estado el año pasado en un pomposo evento organizado en las instalaciones de la Ciudad Universitaria. El “Transformer” como lo bautizaron muchos transportistas desde un principio, estaba dirigido para facilitar la modernización del transporte público... pero de Saltillo. Según Tafoya, a los crédulos de Torreón sólo los trajeron vueltas y vueltas. Sus comentarios fueron avalados por personal de la propia oficina de Autotransporte del Estado, Delegación Laguna, que aseguran vehemente a uno de nuestros subagentes, que el secretario de Comunicaciones y Obras Públicas del Gobierno del estado, Jorge Viesca Martínez, dio instrucciones tajantes de que se obstaculizaran en todo lo posible –pero no evidente- las actividades del municipio lagunero a fin de que “ellos hicieran su propio esfuerzo”. Ayer, los aludidos se hicieron “ojo de hormiga” y sólo Pablo Arizpe Dávila, subsecretario de Comunicaciones y Transportes, tuvo a bien contestar a los reclamos con un simple: “son idioteces”. En fin, así se las gastan en el Palacio Rosa.
**************
Prácticamente desaparecido anda el director de Desarrollo Urbano, Eduardo Jiménez Saracho, luego del rotundo fracaso que significó el proyecto para cambiar la circulación de algunas vialidades. Tan vapuleado resultó el funcionario, por parte de vecinos de las colonias Los Ángeles, Nueva Los Ángeles, Granjas San Isidro y aledañas que hasta le señalaron públicamente su falta de capacidad urbanística y quizá por enfrentamientos verbales que tuvo con ellos, decidió alejarse de los reflectores, tanto, que prácticamente mandó clausurar el quinto piso del edificio que fuera del Banco de México a donde nadie tiene acceso y los funcionarios de primer nivel sólo entran haciendo uso de su llave. En el elevador hay un gran letrero a la llegada a ese piso, donde se prohíbe la entrada al público, lo que no se explica si se supone que es una oficina pública. En fin, quién sabe qué le pasa a este funcionario municipal, pero de plano no da una.
****************
Algo debe tener el aire de la capital peronera que literalmente transforma a aquellos que llegan a tener una oficina colgada de la ubre presupuestal. Ni los laguneros se pueden sustraer, tal y como le pasa a uno de nuestros ex alcaldes –siempre muy bien peinado, ganadero y Capitán Piloto Aviador, para mayores señas- que en cuanto agarra hueso, toma una gran bocanada de aire futurista. Por estos días anda de gira por Piedras Negras y literalmente se desvive porque alguien dé cuenta que trabaja mucho en el asunto de la reconstrucción de viviendas para los afectados por la crecida del Río Escondido. Bueno, en honor a sus buenos oficios y esfuerzo sobrehumano por llamar nuestra atención, sale desde esta columna, un saludo. Ánimo.
**************
Es curioso, cuando una publicación no resulta favorable a la posición de alguna persona o partido político, acusan al medio informativo de manipulador y poco objetivo, tal como hoy lo hace el perredista, Manuel de Jesús Landeros García. La nota que enfureció al también ex secretario de un ayuntamiento priista, publicada ayer en El Siglo de Torreón da cuenta de que el ex regidor perredista, Juan Manuel Zapata Escobar, reprueba las acciones de la diputada local, Beatriz Granillo Vázquez, quien encabezó un bloqueo en el bulevar Revolución y calzada Colón, el pasado jueves. Landeros García dice que el PRD corrió a Zapata Escobar y que por lo tanto, no pertenece al partido. Si Zapata Escobar pertenece o no al PRD, es cuestión del propio instituto político. Él hizo una declaración como cualquier ciudadano sobre un hecho público y eso molestó sobremanera a Landeros García. Ni hablar, así se cuecen las habas en ciertos sectores de nuestra ya de por sí cuestionada clase política.
******************
Y al otro lado del Nazas, un asunto interesante: resulta que los empleados del Municipio de Gómez Palacio tienen miedo; se sienten hostigados por los militantes del Partido Acción Nacional, quienes los vigilan con la esperanza de sorprenderlos cometiendo algún delito electoral. Los panistas ya presentaron tres denuncias penales, dos por el robo de su publicidad y una más contra un empleado del ayuntamiento que utilizó un vehículo oficial para el “acarreo” durante un acto de campaña del candidato priista a la alcaldía. Entonces, los empleados municipales tienen razón al estar temerosos, ya que distraer recursos públicos –ya sea dinero o vehículos oficiales- para apoyar las acciones proselitistas de sutano o perengano, es un delito. La Alcaldesa dice que quiere cortar de tajo cualquier cosa que se pueda prestar a malas interpretaciones y por ello doña Leticia ordenó que todos los vehículos oficiales sean concentrados a partir de las 16 horas entre semana y a partir de las 14, los sábados, en las afueras de la Presidencia Municipal y además, ordenó suspender los apoyos sociales hasta que pasen las elecciones para que no se genere sospecha alguna. Bien hecho, pues tal y como se están las cosas, el “apoyo extra” a don Octaviano resulta excesivo, innecesario e ilegal.
******************
Por cierto, algunos grillos comentan que ya se bautizó a los militantes del PAN en Gómez como “Los Ñoños”, en recuerdo a aquel personaje obeso que interpretaba el actor Edgar Vivar en el popular programa del “Chavo del Ocho”. Tal parece que la campaña de los panistas es similar a la actitud de este personaje, quien durante muchas de sus intervenciones decía la famosa frase, “¡mírelo eh, mírelo eh!” para acusar al “Chavo”, a “Kiko” o la “Chilindrina” y es que tal parece que la campaña de Acción Nacional está basada en el golpeteo que intenta debilitar, pero no vencer. Falta poco más de mes y medio para la cita en las urnas y no se ve por ningún lado, alguna estrategia mediática, de movilización ciudadana o conceptual, encaminada a ganar la Presidencia Municipal –tarea de suyo titánica e imposible dirían algunos- sino sólo algunos chispazos de esos que se agotan en el “miren, aquí estoy y puedo hacer ruido”.
***********************
Y ya encarrerados por aquellos terrenos, nuestros subagentes apostados en la Comarca Lagunera de Durango advierten un hecho significativo: el sexenio de Ángel Sergio Guerrero Mier está por terminar y no hay quién atine, aunque sea por error, a solucionar algún problema en la región. Resulta que la que la Secretaría General de Gobierno del Estado de Durango, a cargo de José Miguel Castro Carrillo, ignora que la Ley que crea los Consejos Tutelares para Menores Infractores contempla que en Gómez Palacio exista un albergue, un comisionado y un consejo técnico interdisciplinario, para que resuelva los casos donde los menores de 16 años y mayores de diez años cometan alguna falta administrativa o un delito contemplado en el Código Penal. Desde hace años que el internado Francisco Zarco dejó de cumplir con la misión y por costumbre, el agente del Ministerio Público se encarga de revisar los casos de menores infractores, como si fueran adultos… y si no lo ignora, pues simplemente le vale una pura y dos con sal.
