El abanico de pequeñas dimensiones tuvo uno de sus mayores usos en China, donde además de ser utilizado para refrescarse, era un elemento decorativo y elegante. INGIMAGE
Actualmente es un elemento cuyo uso podría considerarse fuera de época, sin embargo, en su tiempo fue muy utilizado e incluso era usado como símbolo de respuesta.
Nos referimos al abanico, del cual se tienen registros de que fue utilizado por civilizaciones antiguas como la Egipcia, en la que eran de grandes dimensiones, fabricados con plumas y movidos por esclavos para dar aire al faraón y espantarle los insectos que lo rondaban.
También los Estruscos, según se sabe, utilizaban abanicos desde el año 500 antes de Cristo.
El abanico de pequeñas dimensiones tuvo uno de sus mayores usos en China, donde además de ser utilizado para refrescarse, era un elemento decorativo y elegante.
Los abanicos chinos se producían con materiales como seda, papel, plumas y bambú, y resaltaban porque eran pintados decorativamente con inigualables diseños.
Fue hasta el siglo VII después de Cristo cuando vio la luz el abanico plegable, en Japón. Posteriormente se difundió y comercializó en Europa, donde fue España el país que mayormente lo acogió y quien lo trajo a América.
Cabe señalar que el abanico fue convirtiéndose también en un elemento propio de los rituales sociales, por ejemplo, para decir a un hombre que lo quería, la mujer que utilizaba el abanico escondía los ojos detrás de este. También si una mujer realizaba movimientos rápidos con su abanico significaba que estaba comprometida, mientras que si los movimientos eran lentos, eso quería decir que estaba casada.
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