Seguridad. La Policía de Nueva York aumentó la vigilancia en eventos públicos, como el juego de los Yanquis ayer.
Un día después de que dos bombas en la meta del Maratón de Boston dejaron tres muertos y más de 100 heridos, autoridades de Estados Unidos tenían ayer más preguntas que respuestas sobre los autores del atentado y sus motivos.
Las primeras investigaciones señalan que las dos bombas fueron hechas en ollas de presión llenas de clavos y postas para actuar como "metralla" y causar el mayor daño posible.
Pero la Casa Blanca y el Buró Federal de Investigaciones (FBI) reconocieron que aún no tienen indicios sobre los sospechosos de haber colocado los explosivos.
El presidente Barack Obama calificó ayer por primera vez el atentado del lunes como un "acto de terrorismo", pero hasta ayer ningún grupo se había atribuido la autoría del ataque.
El FBI informó que las ollas usadas para las bombas fueron colocadas en mochilas y detonadas a control remoto.
Médicos que atendieron a heridos dijeron que la mayoría tenía incrustados clavos y postas como las usadas en rifles de aire.
Sin embargo, autoridades admitieron que la investigación apenas está "en su infancia".
El conteo de heridos aumentó ayer a 183, según autoridades de Boston.
La Policía local y el FBI aún examinaban ayer cientos de videos de la explosión y los momentos previos, mientras que los fragmentos de las bombas fueron enviadas a laboratorios.
El FBI aclaró que un estudiante de Arabia Saudita detenido el lunes no es sospechoso del ataque sino que se le interrogó como testigo.
Obama reconoció que ignoran si el atentado fue obra de una sola persona o de un grupo y si los autores son parte de una red internacional o fue un acto de terrorismo doméstico.
Mientras tanto, Estados Unidos cayó presa del pánico ante elevadas medidas de seguridad en varias ciudades.
En Nueva York, el aeropuerto de La Guardia fue evacuado por una falsa alarma provocada por un paquete sospechoso.
En el aeropuerto de Boston, un avión procedente de Filadelfia fue detenido y evacuado para que el FBI examinara una mochila.
En Wisconsin, el campus de la Universidad Carroll fue cerrado tras el reporte de un hombre armado.
