La súper modelo Christy Turlington nació el 2 de enero de 1969 en Walnut Creek, California, Estados Unidos. De niña su pasión fueron los caballos y la equitación.
A los 13 años, su padre la inscribió en competiciones locales y continuamente entrenaba en Coral Gables, localidad donde creció con sus dos hermanas y fue descubierta por el fotógrafo Dennie Cody, quien convenció a la joven para que incursionara como modelo.
Al principio, los padres de Christy se sentían algo inquietos de permitirle aventurarse en el mundo del modelaje, pero luego de varios intentos, dieron su consentimiento.
De inmediato, la joven fue contratada por una agencia local y su primer sesión fotográfica fue una serie de anuncios para una cadena de tiendas, tras la cual le llegaron más propuestas de trabajo.
De esta forma, se familiarizó rápidamente en el mundo de la moda de Miami; pero los rumores sobre ella llegaron a Nueva York y la cazatalentos del modelaje, Eileen Ford, le ofreció trabajo en París.
Sin embargo, sus primeras sesiones de fotografías para Ford en Europa no fueron exitosas y Christy regresó a Estados Unidos de inmediato, casi al mismo tiempo en que modelos como Stephanie Seymour, Cindy Crawford y Linda Evangelista comenzaron a acaparar la atención del público, a las que pronto alcanzó.
En 1985, cuando Christy tenía sólo 16 años, Eileen Ford se negó a darse por vencida y envió a Turlington con los fotógrafos y publicaciones más importantes de Nueva York. Luego de aparecer en la revista "Vogue", en Estados Unidos, Turlington regresó a la preparatoria para completar su educación antes de continuar con su carrera como modelo.
En 1987 su carrera en este ámbito finalmente despegó, luego de aparecer en la portada de dicha publicación. Posteriormente, los mejores fotógrafos del mundo comenzaron a tocar a las puertas de la modelo.
Diseñadores como Chanel, Christian Locroix, Gianni Versace y Azzedine Alaia buscaron ese rostro fresco para sus desfiles y en ese tiempo, Christy ya era considerada una supermodelo y figura de importantes firmas, por lo que su carrera iba en ascenso.
A la par, Christy comenzó a mostrar su lado altruista, al donar todas las ganancias obtenidas por la venta de su calendario a la American Foundation for El Salvador, una organización de ayuda a los pobres, al tiempo que participó en varias organizaciones caritativas.
En cuanto a la educación, Christy fue a la Universidad de California y a la Gallatin School de la Universidad de Nueva York, donde recibió un diploma en filosofía y literatura con una especialización en filosofía oriental.
En su vida personal fue muy comentada su relación con el actor Jason Patric, pero la modelo se casó con Edward Burns en 2003, y tuvo dos hijos. Turlington ha sido musa de fotógrafos como Herb Ritts, Steven Meisel, Bruce Weber y Peter Lindbergh, quien la eternizó en su libro "10 women".
Además, la modelo estadunidense se convirtió en socia del Fashion-Café, junto a las top model Claudia Schiffer, Naomi Campbell y Elle MacPherson. Sus principales trabajos a la fecha han sido para Anne Klein, Chanel, Cerruti, Maybelline, Calvin Klein y Valentino, entre otros.
También ha sido portada de alrededor de mil revistas, entre ellas, "Elle Grecia", "Harper’s Bazaar", "Vogue UK" y "Marie Claire US". En 1993 Christy Turlington fue nombrada una de las 50 mujeres más hermosas, según la revista "People".
Aunque nunca se sintió del todo satisfecha como modelo, se ha erigido como defensora de buenas causas como la promoción de una vida sana y la lucha contra el SIDA y el tabaco (su padre murió de cáncer de pulmón).
Asimismo, la Top Model se sumo a la extensa lista de famosas que contribuyen a la imagen de la reconocida marca por todo el mundo, tales como Reese Witherspoon, Salma Hayek, Patrick Dempsey y la cantante Fergie, entre otros.
En agosto pasado la famosa modelo posó para la revista "Vogue Italia", en la que lució prendas de alta costura para la lente de Steven Meisel. Durante una visita a El Salvador en 2005 y otra a Perú en 2007, Turlington vio las penurias por las que debían pasar las mujeres embarazadas en los países en vías de desarrollo.
Además de las complicaciones que ella tuvo durante el parto de su hijo, le dieron la idea de hacer una película sobre los problemas de salud a los que se enfrentan las madres en todo el mundo.
Ante ello, grabó un documental para destacar los proyectos de ayuda que contribuyen a mejorar las condiciones higiénicas y sanitarias de las mujeres.
Así, debutó como directora de "No woman, no cry", que se estrenó en 2010 en el Festival de Tribeca (Nueva York), y se filmó en Estados Unidos, Guatemala, Bangladesh y Tanzania.
Turlington, madre de dos hijos, es una ferviente yogui que ha publicado el libro "Living yoga: Creating a life practice" y colabora en forma frecuente con diversos medios de comunicación.
En 2011 fue embajadora de una nueva fragancia de famosa marca internacional. La empresa eligió a la modelo para ser la representante de su aroma "Slip Into", el cual se puso a la venta en la primavera del mismo año. La botella de este perfume estuvo inspirada en la silueta de mujer que se calza unos zapatos de tacón.
