El Señor hizo a la amiba.
Después dio vida a los insectos.
En seguida creó los peces.
Luego puso las aves en el cielo.
A continuación hizo a los animales.
Y finalmente formó al hombre.
-Vaya -le comentó el Espíritu-. Veo que has ido de más a menos.
-Espera lo que sigue -le contestó el Señor fijando la vista en una costilla de Adán-. Ahora voy a ir de menos a más.
¡Hasta mañana!...