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Rescatan a militares británicos

Aseguran que los seis militares sólo exploraban la gruta poblana.

25 de marzo de 2004.

Cuetzalan (México), (EFE).- Los seis espeleólogos británicos atrapados desde hace una semana en la cueva de Alpazat, en las montañas del estado de Puebla, fueron rescatados.

Fuentes de Protección Civil del estado confirmaron que pasado el mediodía fueron sacados de la gruta Chris Mitchell, John Roe, Simon Cornell y Tobey Hamnett y por la tarde Jonattan Sims y Charles Milton en perfecto estado de salud y "sin ningún problema físico".

Dijeron que la operación de rescate demoró diez horas y que los espeleólogos fueron atendidos por médicos que esperaban en la boca de la cueva, donde también había personal sanitario, de migración, de la secretaria federal de Energía, de la Policía Judicial y de la Fiscalía.

Los rescatados deberán explicar a las autoridades de Migración sobre sus actividades y dependiendo de ello se definirá su situación legal en México.

El director de Protección Civil, Joel Hernández, informó de que, mientras, "el grupo quedará a disposición del Ejército mexicano".

Acompañados de espeleólogos de México, los trabajos de salvamento los hicieron dos buzos británicos y dos mexicanos, vigilados en la boca de la gruta por soldados y mandos militares a cargo del general Manuel García Ruiz.

Inicialmente los espeleólogos británicos, varios de los cuales son militares, rechazaron la ayuda ofrecida por las autoridades locales, mientras que México envió una nota de protesta a Londres por no ser avisado de una operación en la que participan militares.

En la nota, el gobierno mexicano dice que un grupo de ciudadanos británicos "presuntamente miembros del Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea" del Reino Unido fue localizado en México "realizando un trabajo de investigación científica en la red de cavernas de Alpazat, en Cuetzalan, estado de Puebla".

Agrega que la Cancillería manifiesta su "profunda preocupación" por el hecho de que el grupo ingresara en las cuevas sin permiso de las autoridades para realizar su actividad científica, "tal y como dictan las leyes mexicanas y como se ha procedido normalmente para la realización de este tipo de investigaciones".

"En este sentido y considerando las extrema reserva con que ha procedido el grupo de nacionales británicos localizado en la zona de Cuetzalan", México "solicita una explicación detallada sobre el tipo de actividades" que efectuaban y "sobre los objetivos de su investigación", indica la nota.

El consejero de la embajada británica en México, Vijay Rangarayan, declaró que el Gobierno de su país está dispuesto a dar "todas las explicaciones que sean necesarias"

Recalcó que para los expedicionarios entrar en las grutas es un hobby, que hay militares y civiles y que "lo más importante es que todos son espeleólogos y tienen mucha experiencia".

El propósito de la misión civil es "explorar estas increíbles cuevas, nada más", enfatizó el consejero al señalar también que ha habido varios mexicanos que en oportunidades anteriores han estado adentro de las cavernas con el equipo británico.

Lamentan diputados intromisión de británicos

Integrantes de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados calificaron de lamentables y violatorias de la soberanía nacional las actividades que de manera ilegal desarrollaron militares británicos en las grutas de Cuetzalán, Puebla.

El legislador José Alberto Aguilar Iñártritu recordó que hasta el momento no ha sido aclarado el espionaje que sufrió la sede de México en la Organización de Naciones Unidas (ONU), durante a los días previos al inició del conflicto bélico en Iraq, el cual se atribuye a servicios de inteligencia británicos.

En entrevista consideró que de no existir una respuesta satisfactoria por parte del Reino Unido a la nota diplomática que presentó el gobierno mexicano para que explique este asunto, sería necesario revisar la relación bilateral.

Confió que el rescate de los ingleses se realice con todo éxito por razones de índole humanitario, pero ello no exime a los extranjeros a explicar lo referente a su situación migratoria y sobre todo qué tipo de actividades realizaban.

Entre los británicos hay ingenieros y militares que trabajan en submarinos

Al menos cuatro elementos del grupo de 16 espeleólogos británicos que acudieron a Cuetzalan, de los cuales seis quedaron atrapados en la cueva Alpazat, tienen registros de expediciones en la zona en el año 2000.

En el sitio de internet http://cuetzalan.simplemente.net aparecen entrevistas con John Taylor, Kevin Welch, Jonathan Sims y Charles Milton, los dos últimos están atrapados junto con cuatringleses al interior de la gruta, cuyo rescate está planeado para hoy.

John Taylor, identificado como el jefe de la expedición de este año, publicó en el 23 de febrero de 2000 en el sitio de internet ser "un civil que trabaja en el departamento de electrónica en una fábrica de partes automotrices, que comenzó a explorar cuevas cuatro años antes".

Su interés despertó cuando, junto con sus amigos, querían escalar unas montañas pero el mal tiempo se los impidió, por lo que decidieron bajar a la cueva Eldon Hole en Derbyshire, Inglaterra, con lo que la espeleología se convirtió en su pasatiempo.

"Lo que pasa en las cuevas tiene una enorme similitud con la vida diaria, en ella también tienes que tomar decisiones de las que dependen otras cosas y cuando es entonces cuando pones mucha atención en el lugar donde vas a poner los pies", cita la página web.

Su primer viaje a México lo hizo a las grutas de Cuetzalan, hace cuatro años, lugar en el cual -aseguró- se siente seguro por la sencillez de la gente, lo pequeño y autóctono del municipio.

"Recuerdo que mi padre me hablaba de los indios americanos y me contaba cómo eran y su forma de mirar y caminar. El otro día iba bajando por un camino y vi a dos indígenas que venían hacia mí y recordé esos relatos", indicó John Taylor.

Uno de los atrapados, Jonathan Sims, publicó, a manera de "diario" en el sitio de internet el 22 de febrero de 2000 que las lluvias en la zona había llenado el sifón de Alpazat y que no volverían a cruzarlo por temor a sufrir un accidente.

Aseguró que los espeleólogos consideraron explorar sistemas con arroyuelos, aparentemente inofensivos, que se vuelven peligrosos al inundarse de golpe durante las tormentas que aparecen de forma repentina en la zona.

"En expediciones anteriores vivimos la experiencia de varias inundaciones, tres de las cuales han atrapado expedicionarios bajo tierra poniendo en peligro sus vidas. Este año (2000) utilizamos un método combinado de reportes climatológicos y de la máquina del clima que tenemos aquí", dijo.

En la entrevista aseguró que la expedición cambió de rumbo para dirigirse a una nueva área a ocho kilómetros de Cuetzalan, a fin de aprovechar su estancia para recorrer otras grutas antes de regresar a Europa.

"Sabemos de cuatro cuevas más pero han sido exploradas muy poco y casi nada está documentado. Ninguna de estas cuevas parecen ser tan emocionantes y prometedoras como Alpazat, pero ninguna nos pone en peligro ante los cambios de clima", declaró Jonathan Sims.

Charles Milton, otro de los que quedó adentro de la cavidad, indicó en el sitio web que es miembro de la tripulación en el submarino Vengeance, de la Naval Británica. Ha trabajo en submarinos por 21 años, vive en Escocia y es padre de tres hijos.

Indicó que su padre estuvo en el Bristol University's Explorers Club (Club de Exploradores Universitarios Bristol), por lo cual apoyó su pasión de recorrer grutas y, en 1988, se unió a una expedición espeleológica-militar.

Hace cuatro años Charles Milton estaba a cargo de la seguridad del equipo que se internó a Alpazat, quienes no pudieron hacer el recorrido por la inundación de la cueva, pese a tener equipo telefónico de alta tecnología para pedir ayuda.

"México es fascinante, a pesar de que no he tenido tiempo de echar un vistazo alrededor del área, por lo menos no en la superficie, sin embargo el idioma es difícil. He tenido varias conversaciones con habitantes que no hablaban español", indicó.

El 24 de febrero de 2000, en la misma página de internet, Kevin Welch -quien alcanzó a salir de la cueva, dijo ser soldado británico encargado de reparar helicópteros de la armada desde hace cuatro años y medio.

Originario del norte de Yorkshire, indicó que el viaje a la Cueva de Alpazat fue "escalofriante" y se segunda estancia en México, pues la primera fue a Yucatán, pero sólo de paso porque se dirigía a Belice.

"Nunca se sabe lo que viene más adelante, si es que vamos a encontrar un lugar seco para descansar o si hay una salida. Es un trabajo duro, sobre todo cuando te quedas ahí por varios días, ahí es cuando extraño mi cama, mi comida y a mi novia", dijo.

Kevin Welch indicó que ya había explorado cuevas en Francia y España, además de tomar muchas de las fotografías del grupo dentro de las grutas de Cuetzalan.

La cueva Alpazat, ubicada a 30 minutos de la cabecera municipal de Cuetzalan, sufrió, el jueves pasado un deslave y selló la salida a los espeleólogos, dejándolos atrapados.

El consejero de la Embajada Británica en México, Vigay Rangarajan, informó este miércoles a Notimex que la Asociación Mexicana de Espeleólogos y autoridades federales tenían conocimiento de las excursiones que efectúan estos militares desde hace 20 años.

Agregó que los visitantes tienen estancia legal con visa de turistas y negó que se trate de exploraciones científicas o militares para extraer uranio o gas radón, elementos utilizados en la fabricación de bombas.

Por su parte, el mayor inglés Steve Whitlock indicó que sus compañeros al interior de la gruta se encuentran atrapados desde el pasado 18 de marzo y que esperarían a la llegada de buzos británicos para su rescate.

El presidente Vicente Fox Quesada, durante su gira por Centro América, informó que giró instrucciones al secretario de Relaciones Exteriores, Luis Ernesto Derbez, para pedir al gobierno británico una explicación sobre el por qué militares investigan la zona.

Dentro de la gruta están atrapados Jonathan Sims, Charles Milton, Simons Cornwill, Cirs Mitcholl, Toby Hamnett y posiblemente otro inglés de nombre John Roe, quienes no han aceptado la ayuda de las autoriades locales para ser rescatados hasta que lleguen buzos británicos.

El resto del grupo, integrado por Steve Whitloch, Niki Rowland, Kevin Welch, Michelle Gigg, Neil Brammes, Jhon Taylor y Basil Norton.

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