Consideran práctica inexplicable la prostitución infantil
El arzobispo de Durango Héctor González Martínez calificó de perversa y abominable la prostitución en menores de edad, luego de la presunción de posibles casos de explotación de infantes en actividades sexuales en la entidad, revelados por autoridades del Centro de Orientación y Observación de Menores Infractores (COMÍ).
?Ahora hay mucha gente que no cree en el diablo; sin embargo, éste existe, y prueba de ello son tantos males que hay en la actualidad, como es la prostitución?, asentó monseñor González Martínez, quien reiteró que en estos momentos el hombre y la mujer son seducidos a pisar caminos torcidos.
Otra lectura tiene que ver con la ausencia de valores y una conducta perversa que orilla a prácticas inexplicables, como es la prostitución infantil, sean en cualquier parte del mundo, enfatizó el jerarca de la Iglesia Católica en la Arquidiócesis de Durango.
?¿Pero hasta dónde avanzará este tipo de males??... se autocuestiona y se responde inmediatamente: ?Hasta donde nosotros lo permitamos, hasta donde dejemos de lado los valores y la protección a las personas desvalidas (como es el caso de las niñas y los niños).
?La tentación del demonio es real y deben verla los cristianos, pero sobre todo deben hacer frente a este tipo de males con los consejos del papa Pablo VI expresados en la encíclica Vida Humana, que invita a respetar y defender la dignidad de las personas, como cuerpo y templo del Espíritu Santo.
?Todos somos hemos sido hechos a imagen y semejanza de Dios, de tal manera que cualquier perversión resulta un pecado grave?, dijo González Martínez, en entrevista para El Siglo de Durango.
OPINIÓN
Deterioro espiritual
La prostitución en cualquier de sus formas refleja el nivel del deterioro espiritual de las personas y la desintegración de las familias, expresó Ismael Pacheco, pastor de la Casa de Vida y Oración, iglesia cristiana de filiación metodista.
El problema del llamado comercial sexual refleja, además de la carencia de valores, un problema de falta de orientación, falta de educación, mala información y una decadencia de la dignidad como personas.
Las situaciones de prostitución son casos muy tristes que deben motivar una reflexión general en todos los cristianos y personas de buena voluntad, asentó el pastor Pacheco.
