El Congreso de la Unión elevó a rango constitucional el derecho de los ciudadanos a tener agua en calidad y cantidad suficiente, pero ambientalistas coinciden en que la norma es insuficiente para la gravedad del problema, en particular en La Laguna.
"No basta con que se hagan decretos y se establezcan como leyes. Se requiere una concientización de parte de toda la ciudadanía y las instituciones para poder asegurar el suministro del agua", dijo Manuel Gallegos, presidente de la Fundación Jimulco.
Roberto Muñoz, de la comisión de medio ambiente en la Coparmex, consideró que las autoridades deben tomar "acciones inmediatas" para remediar la sobreexplotación del acuífero y mejorar la calidad del agua.
"No es suficiente que exista un decreto, necesitamos acciones de las autoridades y como ciudadanos, necesitamos exigir que se comprometan", dijo.
La reforma al artículo cuarto de la Constitución fue publicada en el Diario Oficial de la Federación y exige al Estado garantizar que "toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible".
El artículo también señala que la Federación, los estados y los municipios deben participar para garantizar este derecho.
Eglantina Canales, secretaria del Medio Ambiente de Coahuila, reconoció que en La Laguna se cuenta con un problema muy serio en términos de la contaminación por arsénico.
"Es uno de los problemas ambientales más sentidos y más serios porque afectan directamente la salud humana", afirmó.
