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Viggo Mortensen, guerrero y poeta a la vez

Agencias

Los Ángeles, EU.- Antes de llamar a Viggo Mortensen para que tuviera a su cargo uno de los roles centrales en The Lord of the Rings, el director Peter Jackson decidió ofrecerle esa oportunidad a un joven y desconocido actor australiano. Al poco tiempo de haber comenzado la producción dicho actor fue dado de baja y nadie más volvió a saber de él.

Los motivos por los que Jackson decidió prescindir de sus servicios fueron dos: el actor no tenía la suficiente edad y carecía de la pasión y el entusiasmo que necesitaba para representar, con toda credibilidad, a un personaje como el guerrero Aragorn.

Canceladas las expectativas que se habían creado alrededor del novato actor, Peter Jackson llevó a cabo una intensa búsqueda que, finalmente, lo condujo al encuentro de Viggo Mortensen, artista sobre el que no tenía ninguna información relacionada con su trayectoria en Hollywood y las seis películas en las que había actuado hasta ese momento.

Afortunadamente para Jackson, la personalidad y el mítico espíritu de Aragorn encontraron, a través del milagro del cine, una perfecta encarnación en el no muy imponente físico de Mortensen.

“A lo mejor, si Peter Jackson le hubiera ofrecido el papel a alguien como Russell Crowe o Keanu Reeves no estaría yo aquí haciendo esta entrevista”, dijo el actor con muy buen sentido del humor durante una visita que hizo a Los Ángeles.

Con ese mismo ánimo Viggo Mortensen habló utilizando su español de Argentina (vivió en ese país por algunos años) en más de una ocasión, sobre las experiencias que vivió a lo largo de tres arduos años.

Viggo, ¿cómo se produjo la posibilidad de que pudieras integrarte al reparto de la trilogía The Lord of the Rings?

Pienso que fue algo más que suerte la forma en que se dio esta oportunidad. Yo no conocía los libros escritos por J.R.R. Tolkien, pero muchos amigos míos me habían descrito la historia de los pequeños hobbits llenos de entusiasmo. Así fue como empezó a crecer en mí una fascinación muy especial hacia el mundo que Tolkien fue capaz de crear con su poderosa imaginación literaria. El día que recibí la llamada de Peter Jackson, en la que me invitaba a participar en su película, entendí que el destino estaba poniendo frente a mí la oportunidad más importante de mi carrera. Por eso no dudé ni un minuto en decirle que aceptaba gustosamente ponerme a sus órdenes.

¿Cuánto tiempo de preparación tuviste antes de comenzar el rodaje de la primer película de la trilogía?

Ninguno. Simplemente seguí las ordenes de Peter Jackson: tomé un avión tan pronto como fue posible para Nueva Zelanda y empecé a trabajar en la semana siguiente. Aunque acepté el desafío que eso representaba, debo reconocer que no fue tan fácil para mí ajustarme al plan de rodaje que ya se había puesto en marcha.

¿Qué rasgos de la personalidad de Aragorn fueron aquellos con los que pudiste sentirte más identificado?

Yo creo que con su valentía y espíritu de sacrificio. En cierto sentido, alguien como él representa todo aquello que cualquier persona encuentra admirable en los personajes románticos. Aragorn no pretende en ningún momento convertirse en héroe. Aragorn es un héroe a pesar de sí mismo, por la actitud ética y moral que tiene hacia la vida.

¿Tuvo algún efecto sobre ti, en términos artísticos, humanos o espirituales, interpretar durante tanto tiempo a un personaje como Aragorn?

Por supuesto que sí. Yo creo que ningún actor podría permanecer inalterable viviendo casi tres años dentro de la piel de alguien con su vitalidad y coraje. Aragorn tiene un código de valores muy sólido y bien fundamentado. De esa línea de conducta tan admirable yo aprendí cosas que ahora forman parte de mi vida. Por ejemplo, creo que entiendo mejor lo que son la tolerancia, la solidaridad y la compasión. Y el sitio tan importante que deben ocupar estos sentimientos en nuestro corazón.

¿Qué instrucciones recibiste de parte de Peter Jackson para interpretar el papel de Aragorn?

Peter sabía muy bien qué lugar iba a tener Aragorn en las tres películas que iba a dirigir y cuál era el proceso evolutivo por el que el personaje tendría que ir pasando. Aragorn es un guerrero que debe aprender a aceptar las responsabilidades que tiene. Una de ellas, la más importante de todas, creo yo, es la de saber que en su futuro hay un destino ineludible, al cual no puede ni debe renunciar. Porque, tarde o temprano, llegará a convertirse en rey del imperio al que pertenece. Por todo esto, Peter Jackson me dijo que Aragorn era un personaje que está en permanente lucha consigo mismo. Así que yo tuve que proyectar, en todo momento, esas inquietudes existenciales que lleva dentro. Creo que pude satisfacer las peticiones y órdenes que recibí de Jackson, porque cuando terminamos de filmar The Return of the King me llamó a su oficina para decirme que estaba muy orgulloso de mi trabajo. Y por supuesto yo le dije que ese mérito no era todo mío, sino que en gran parte le pertenecía a él.

¿Cuál fue el desafío más grande al que te enfrentaste durante el rodaje de la trilogía The Lord of the Rings?

Estar lejos de mi familia y mis amigos durante casi tres años. Aunque tuve la oportunidad de regresar a California un par de veces, por sólo unos cuantos días, la mayor parte del tiempo que duró la filmación de las tres películas (The Fellowship of The Ring, The Two Towers y The Return of the King) no salí muy lejos de Nueva Zelanda. Las pocas horas libres que tenía, entre la filmación de una secuencia y otra, las utilizaba para escribir notas de poesía y tomar fotografías en los alrededores de donde filmábamos. Yo no fui, por supuesto, el único actor que pasó por largos periodos de nostalgia. A casi todos los que participamos en este proyecto nos sucedió lo mismo. Pero también se produjo algo muy positivo durante la realización de The Lord of the Rings: surgió una gran amistad entre todos nosotros. En más de un modo, puede decirse que terminamos convertidos en una gran familia que a lo mejor, algún día, podrá volver a reunirse nuevamente.

¿Que opinión tienes sobre la adaptación cinematográfica que hizo Peter Jackson de los libros de J.R.R. Tolkien?

Aunque no llegué al final de su lectura, cada uno de los libros de Tolkien describe una historia tan abundante en personajes, mitos y leyendas que resulta un desafío casi imposible tratar de transformarla en película. En ese sentido, Peter Jackson realizó una admirable labor de síntesis al escribir una versión que, juntas las tres películas, no alcanza a tener más de nueve horas y media de duración. Quienes opinan que nuestra trilogía no le hace justicia a la versión escrita de The Lord of the Rings no entienden la diferencia que hay entre un libro y una película. Aunque están basadas en la obra escrita por Tolkien, las tres cintas de Peter Jackson tienen un valor artístico propio. No son, sencillamente, una versión animada en colores de la aventura que concibió dentro de su fértil imaginación Tolkien.

¿Qué sentimientos te produce saber que con The Return of the King ha llegado a su fin el proyecto cinematográfico más grande de todos los que has filmado hasta ahora?

Creo que mis compañeros y yo estamos experimentando una serie de sensaciones en las que están mezcladas la tristeza y la alegría. Pienso que nuestras vidas quedaron marcadas para siempre por las experiencias que tuvimos en cada una de las tres cintas de la serie The Lord of the Rings. Supongo que difícilmente podremos volver a tener otra oportunidad como ésta, pues suelen presentarse una sola vez en la carrera de cualquier artista. Lo único que me hace sentir tranquilo, ahora, es saber que en todo momento puse lo mejor de mis esfuerzos en interpretar a un personaje tan complejo y fascinante como Aragorn.

¿Qué lugar ocupan en tu vida profesional la poesía y la fotografía, actividades a las que te dedicas cuando no estás trabajando en una película?

Para mí son igual de importantes que mi trabajo como artista de cine. Aunque son medios diferentes, escribir poesía y tomar fotos no es algo sencillo. Se requiere poner mucha dedicación y esfuerzo para poder hacerlo bien. Aunque tengo varios libros de poesía publicados, todavía no considero que soy un verdadero poeta. En cuanto a la fotografía, puede decirse que estoy comenzando a superar la curva del aprendizaje inicial.

¿Es verdad que hace poco tiempo fundaste tu propia compañía editora de libros?

Sí. Lo hice porque así tendré la oportunidad de publicar textos de escritores y artistas que son rechazados por las grandes editoriales comerciales. Esta compañía es pequeña e independiente. Y por lo mismo no tiene compromisos ideológicos y políticos con nadie. Lo único que no vamos a publicar en ella, jamás, serán libros que apoyen la guerra en Iraq o la salvaje y desmedida explotación que hacen los países ricos de las naciones pobres, tanto en América Latina como en África, Asia y el Medio Oriente.

¿A qué atribuyes el éxito y la popularidad que han tenido los filmes de la trilogía The Lord of the Rings?

Yo creo que es porque recuerdan al mundo que, pese a todo, siempre existe la posibilidad de que el bien pueda terminar venciendo al mal. La historia que Tolkien narra en The Lord of the Rings habla de virtudes tan eternas como el coraje, el valor, la lucha por la justicia, la amistad y el amor. Por eso sus libros nunca van a pasar de moda. Yo pienso que no todos los seres humanos han sido víctimas, todavía, del materialismo, el vacío espiritual, los afanes de enriquecimiento económico y la superficialidad a la que ha llegado la sociedad contemporánea. Gracias a The Lord of the Rings gran parte del público se ha dado cuenta de que, aun en medio de las dificultades y tragedias más grandes, todavía queda lugar para la esperanza, los sueños y la generosidad. Y eso, creo yo, es algo muy importante para quienes, después de ver nuestra película, entienden que por muy grande y poderosa que sea, la muerte jamás podrá imponerse a la vida.

A que no sabías que...

Mortensen es un experto fotógrafo y actualmente está trabajando en un nuevo libro en el que combina poesía y fotografía.

-Padres: su padre es de Dinamarca y su madre de los Estados Unidos.

-Datos curiosos: vivió su niñez con su familia en diversos países latinos, entre ellos Argentina y Venezuela, por lo que entiende y habla español a la perfección, lo que le permitió rodar en España varias películas, como Gimlet de José Luis Acosta o La Pistola de mi Hermano de Ray Loriga. Este paso por los países latinoamericanos le convirtió en un fotógrafo del futbol, siendo seguidor del equipo argentino San Lorenzo.

-Estudios: estudió interpretación en el Warren Robertson’s Theatre Workshop de Nueva York y debutó en el teatro en esta ciudad.

-Carrera: inicia su carrera cinematográfica en California con la película Único Testigo, al lado de Harrison Ford y Kelly McGillis. Anteriormente, en Los Ángeles, había sido premiado por la crítica por su actuación en la obra teatral “Bent”.

-Tras intervenir en películas como Atrapado por su Pasado (1993) de Brian de Palma, Retrato de una Dama (1996) de Jane Campion, Un Crimen Perfecto (1998) de Andrew Davis o 28 Días (2000) de Betty Thomas, Viggo consiguió el estrellato con la trilogía de El Señor de los Anillos (2001), sustituyendo a Stuart Townsend (el primer candidato) en el papel de Aragorn.

-Hobbies: le gusta la fotografía, la escritura, la música y la pintura. Ha publicado un libro de poesía y grabado varios discos de jazz.

-Parejas: se casó y posteriormente se divorció de Exene Cervenka, miembro del grupo punk X. Exene también es ocasional actriz, y apareció al lado de su marido en “Salvation” y “Floundering”.

-Su pareja actual es Lola Schnabel, la hija de Julian Schnabel.

FUENTE: Agencias

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