Torreón, Coah.- El ser casada y tener un hijo no le impide a una mujer realizar sus sueños, y para prueba basta un botón: Yadira, quien se convirtió la noche del domingo en la octava expulsada de Operación Triunfo.
La ahora ex alumna invitó a todas las amas de casa a luchar por lo que desean para no verse frustradas. “Yo también tengo esposo e hijo, además debo ocuparme de las labores de mi casa, pero definitivamente no soy una mujer tradicionalista, pues además de realizar mis tareas hago lo que más me gusta, que es cantar. Por eso le digo a las mujeres que si tienen deseos de hacer algo que lo realicen, sino se van a frustrar”, dijo en entrevista para El Siglo de Torreón.
Ya sin el sentimiento que le dio salir del Instituto, esta madre de 27 años de edad señaló estar tomando este momento como una etapa muy hermosa de su vida, pero ya está esperando lo que sigue.
En la Gala de Amor, Yadira recibió el 31.54 por ciento de votos a favor, en contra de los 68.46 que el público le dio a Lizette, la mayor diferencia en las expulsiones hasta el momento, pero ni eso hizo sentir a Yadira que era menos querida por la gente.
“Nunca ha existido en mi el sentimiento de que la gente haya querido más a Lizette que a mí, sólo tomé las cosas como vinieron, tampoco pienso que por no haber llegado a la final tenga menos talento que los otros, sé que hay muchas cosas bellas para mí y que aún tengo que seguir preparándome”.
Pero esta chica originaria de Culiacán, Sinaloa sabe que esto no sería posible si no contara con el total apoyo de su marido Roberto, joven músico que aceptó quedarse solo para que Yadira viera cristalizado su sueño de ser una gran cantante.
“Roberto me va a aguantar el ritmo, precisamente es él quien me dice que siga adelante y que estará conmigo en todo momento, pero sí le pido a Dios que me ayude a sobrellevar todo esto, si él quiere puede y Dios lo puede todo”.
Momentos de nostalgia
Fueron más de dos meses encerrada, tomó clases, aprendió de sus compañeros y valoró todo lo que tiene en la vida, pero también sufrió fuertes depresiones al pensar en su esposo e hijo.
“Nunca tuve el temor que Roberto se fuera a encontrar a otra mujer, es mucha la confianza que siempre nos hemos tenido, pero lo que sí me preguntaba constantemente era cómo estaba mi hijo, si comía bien... tantas cosas que piensa uno como madre de sus hijos y que le mortifican”, señaló.
De carácter fuerte, honesta y humana se define esta mujer, quien aseguró que dentro del Instituto no se “grillan” los estudiantes como mucha gente piensa, únicamente se hacen comentarios de lo que no les gusta de los demás.
-¿Qué hubiera sido de ti sino hubieras entrado a Operación Triunfo? “Operación triunfo fue una plataforma, pero de no haber formado parte de él de una u otra manera hubiera buscado la oportunidad de hacer realidad mi sueño hasta conseguirlo. Me puse como reto para este año hacer algo en el medio musical, pero si no se me hubiera dado pues ni modo, creo que retomaría mi carrera de abogacía”. concluyó.
