Cada año se pierden por fugas en México más de 20 mil metros cúbicos de agua -20 millones de litros- por kilómetro de tubería para la distribución del líquido.
De acuerdo con estimaciones del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA), las fugas ocasionaron pérdidas por al menos 20 mil 663 metros cúbicos por kilómetro en 2002, cifra que se elevó 21 mil 557 en 2009, último año con datos disponibles.
En tanto, la inversión para la rehabilitación de tuberías se redujo de 5.2 a 3.7 por ciento de los recursos totales para el sector hidráulico en el mismo periodo.
Los datos del Programa de Indicadores de Gestión de Organismos Operadores (PIGOO) indican que por cada 100 litros de agua distribuida 60 llegan a los usuarios y el 40 se pierden por fugas o por mala medición.
Entre las ciudades que destacan en materia de pérdidas de agua destacan Córdova, con 48 mil 129 litros; Irapuato, con 43 mil 960; Tampico, con 41 mil 201; Torreón, con 40 mil 88 litros, y Matamoros, con 35 mil 139.
El Instituto Mexicano de Tecnología del Agua considera urgente que los organismos operadores reduzcan las pérdidas de líquido por fugas en las redes de distribución para garantizar la sustentabilidad de la dotación del servicio de agua potable.
"Las soluciones para pérdidas físicas incluyen la detección y Localización de fugas no visibles, mapeo de zonas con mayores pérdidas, incrementar la capacidad de respuesta en fugas visibles y hacer mas eficiente este proceso; administración de presiones para reducir volúmenes de pérdida y frecuencia de ocurrencia de nuevas fugas; control de niveles para evitar derrames; reemplazo de tuberías con ocurrencia de fugas alto, y reemplazo de tomas en zonas identificadas con alta ocurrencia de fugas", indica en el reporte Agua No Rentable.
La Comisión Nacional del Agua, por su parte, estima que alrededor de la mitad del líquido suministrado por los organismos operadores no es facturado por fugas, tomas clandestinas y deficiencias en los padrones de usuarios.
El agua no contabilizada -el líquido no facturado entre el total producido- supera el 60 por ciento en 16 localidades de más de 50 mil habitantes.
El reporte Situación del Subsector Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento 2010 indica que la proporción llega a 78 por ciento en Valle de Bravo, Estado de México.
En tanto, entre las ciudades con mejores niveles de eficiencia física -el agua facturada entre el total producido- destacan Tecate, con 92 por ciento; Mexicali, con 83; Puerto Vallarta, con 77; Saltillo, con 72, y Monterrey, con 72.
La Agenda del Agua 2030, presentada recientemente por el Ejecutivo federal, plantea entre sus líneas de acción para lograr cuencas y acuíferos en equilibrio la de promover programas de reparación de fugas.
