Efectos. La Bolsa Mexicana de Valores se vio impactada por la volatilidad provocada por la crisis de deuda pública en Europa.
La Bolsa Mexicana de Valores terminó la semana con una pérdida de 1.76 por ciento, motivada por la incertidumbre de la fortaleza de la recuperación económica en Estados Unidos y los temores sobre el sistema financiero en la zona euro.
Del 31 de mayo al 4 de junio de este año, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) restó 554.90 puntos en dos sesiones de avance por tres de retroceso, para dar un balance semanal negativo.
En el periodo, la BMV operó un volumen de mil 021.1 millones de títulos, por importe de 25 mil 703.5 millones de pesos; sólo el sector Salud registró incremento de 0.92 por ciento, mientras que el de mayor pérdida fue Servicios Financieros con 3.20 por ciento.
Para la semana próxima se prevé que continúe la volatilidad ante las recientes noticias sobre Hungría, que no descarta caer en incumplimiento de pago y con ello sumarse a países con problemas deficitarios como Portugal, Irlanda, Italia, Grecia y España.
Además, inicia el periodo de verano, aderezado con el Mundial de Futbol, cuando típicamente baja mucho la operación y eso también afecta el movimiento de los mercados, explicó el director general Adjunto de Análisis y Estrategia Bursátil de IXE Grupo Financiero, Carlos Ponce Bustos.
A decir del especialista, esta semana fue peculiar derivado del día feriado en Estados Unidos, que suspendió la operación de sus mercados, ya que la Bolsa Mexicana de Valores registró un comportamiento no tan malo como otras ocasiones cuando deja de operar Wall Street.
De hecho, dijo, el lunes fue interesante porque parecería que hubo cierto apetito por algunas acciones que tienen fuerte peso en el IPC, sobre todo las del sector de telefonía.
