Un hombre de 42 años pasó 20 meses detenido en una prisión de máxima seguridad de Argentina acusado de violar a su hija, pero ésta se arrepintió y confesó que mintió cuando le inculpó, informó la prensa.
El fiscal retiró los cargos y el tribunal absolvió al acusado, después de que la hija, que cuando le acusó era menor y hoy tiene 19 años, ratificara en el juicio que había mentido, algo que ya había dicho durante la etapa de instrucción, pero no fue tomado en cuenta ante la posibilidad de que hubiera sido coaccionada por la familia.
La abogada defensora del acusado, Claudia Mirele, dijo en declaraciones publicadas hoy por el diario Clarín, de Buenos Aires, que la joven mintió para vengarse de su padre, porque éste "era demasiado recto y quería que sus hijas fueran personas de bien, que estudiaran y que honraran a la familia".
"La principal bronca de la chica hacia su papá era el control estricto del hombre hacia sus cinco hijos. Mi cliente es camionero, pero había llegado a la universidad y para alimentar a su familia dejó de estudiar. Entonces, quería que sus hijos estudiaran y que no fueran vagos. Era un padre rígido que ponía controles", dijo la letrada.
La hija del acusado había declarado en la etapa de instrucción de la causa que la denuncia era infundada.
"Fue un hecho desgraciado. En caso de que no haya secuelas físicas en la denunciante, la Justicia debe construir desde los indicios. La menor, luego de la denuncia, explicó que su padre era inocente. Pero en su momento se temió que la joven hubiera sido amenazada para que diera otra versión de lo sucedido", dijo el fiscal de la Cámara del Crimen Córdoba (centro del país), Marcelo Altamirano.
El acusado estuvo casi dos años detenido por este caso y, de haber sido condenado, hubiera pasado de 8 a 20 años tras las rejas.
