Diversos grupos de cubanos exiliados celebraron hoy el levantamiento de las restricciones de viajes a Cuba y de envío de remesas a familiares en la nación insular por parte del gobierno del presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
"Nos complace porque las medidas que fueron adoptadas en 2004 por el gobierno de (el entonces presidente George W.) Bush afectaban los intereses humanistas de la familia cubana", dijo a Notimex Max Lesnik, presidente de la Alianza Martiana, una coalición de grupos de emigrados cubanos.
"Obama ha cumplido su promesa de campaña electoral, y esperamos además que haya nuevos gestos y actitudes que busquen una solución al viejo conflicto", agregó el dirigente.
Lesnik afirmó que las medidas podrían llegar más lejos con el levantamiento de las restricciones a los propios ciudadanos estadunidenses, algo que dijo "no tiene nada que ver con la relación bilateral, ni el conflicto de ambos países que lleva 50 años".
Ramón Saúl Sánchez, líder del Movimiento Democracia, sostuvo que las medidas representan "un paso importante en la reivindicación de un derecho fundamental del cubano de regresar libremente a su país".
Sánchez dijo que ese derecho primero ha sido "violado durante 50 años por el gobierno de Cuba y después también continuó deteriorándose con la política de 2004 que puso en vigor el presidente Bush".
Jaime Suchlicki, director del Instituto de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos de la Universidad de Miami, dijo que el anuncio evita más presión para el presidente Obama durante la Cumbre de las Américas de Trinidad y Tobago, donde algunos mandatarios quieren incluir el tema de Cuba.
Para Suchlicki las medidas no representan la mayor apertura de un presidente estadunidnese hacia Cuba en décadas, pues dijo que "simplemente estamos volviendo a la situación anterior a 2004".
El investigador estimó poco probable que La Habana responda con alguna medida significativa, más allá de soltar algunos presos políticos o relajar algunas medidas burocráticas.
Según Suchlicki, Cuba no está interesada en ofrecerle concesiones serias a Obama en cuanto a derechos humanos, una apertura política o económica, temas fundamentales que condicionan la posibilidad de un levantamiento del embargo comercial a la nación insular.
'No creo que éste gobierno (cubano), con la ayuda que tiene de Venezuela, China e Irán, esté dispuesto a ofrecerle grandes concesiones a Estados Unidos', sostuvo.
Ninoska Pérez, del Consejo por la Libertad de Cuba, rechazó las medidas porque dijo que en Cuba no ha cambiado nada para hacer concesiones, mientras que la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), que favorece mayor contacto con Cuba, analizaba las medidas.
La nueva política del gobierno de Obama, que se espera sea oficializada más tarde, parte de la base de que los gobiernos de Cuba y Estados Unidos no deben interferir en las relaciones entre los cubanos en la isla y sus familiares en Estados Unidos.
Su núcleo es el envío de remesas y paquetes humanitarios a la isla y la ampliación de estancia y frecuencia de viajes de cubano-americanos a Cuba.
Los cubano-americanos podrán realizar viajes extendidos cada año a la isla, cuando antes se les permitía hacerlo cada tres años y por sólo dos semanas.
También se extendió la definición de "familiar cercano" para incluir visitas a primos, sobrinos y tíos, además de los padres, hijos y hermanos. Permite el gasto de hasta 179 dólares por día en Cuba.
